El Caso Bourne

Titulo Original: The Bourne Identity

Año: 2001

Duración: 113 minutos

País: Estados Unidos

Director: Doug Liman

Guión: Tony Gilroy, William Blake Herron

Música: John Powell

Reparto: Matt Damon, Franka Potente, Clive Owen, Chris Cooper, Brian Cox, Julia Stiles.

Un hombre amnésico es rescatado por la tripulación de un barco pesquero italiano cuando flota a la deriva en el mar. No lleva nada consigo. Sólo las balas que lleva clavadas en la espalda y un número de cuenta de un banco suizo que lleva adherido a la cadera. Carece de identidad y de pasado, pero posee una serie de talentos extraordinarios en artes lingüísticas, marciales y de autodefensa que sugieren una profesión de riesgo. Confuso y desorientado, emprende una frenética búsqueda para descubrir quién es y por qué su vida ha tomado un giro tan peligroso. 

Las películas de acción y espías no son algo a lo que no estemos acostumbrados, ya que cada cierto tiempo, sale alguna, por no decir un par de ellas al año. Pero ninguna de ellas ha llegado a ser nada parecido a lo que ha conseguido la trilogía de Bourne. Es cierto que en la época en la que se estreno la cinta, teníamos alguna nueva de James Bond además de alguna que otra de ‘Misión Imposible’, pero no tiene nada que ver con ninguna de las dos. Yo no soy muy fan de las películas de James Bond, es mas, creo que no he visto ninguna (me pondré a verlas, quizás  me gusten), pero la de ‘Misión Imposible’ si las vi todas, y me quedo con esta por muchas razones que iré diciendo.

Para empezar, no es la típica película en la que el héroe de turno salva al mundo de la manera mas impresionante posible, usando todo tipo de artilugios que mas parecen de un superhéroe que de una persona ‘normal’, si, hablo de James Bond, sino que es un tipo normal (normal, normal del todo, no, es un asesino), que ha perdido la memoria y no sabe quien es y que hace en el mundo. En eso se basa la película, en como ese hombre tiene que averiguar quien es y que ha hecho para que le persigan de la manera que lo hacen, y por el camino empezar a descubrir que no es precisamente un santo, ya que a la hora de manejarse lo sabe hacer, y muy bien. Es muy curioso ver la escena en la que comienza a descubrir lo que puede hacer, porque el mismo se queda sorprendido de sus habilidades, y al mismo tiempo descolocado, porque no sabe como puede hacer eso.

Hay escenas increíbles durante toda la película, persecuciones por las calles de Paris que son simplemente adrenaliticas, no te dejan un respiro. Pero no es algo sobrecargado, esta todo muy bien distribuido, en su justa medida, con un sentido, no explosiones porque si y para rellenar. No, esta película no es así, y sin duda no es la típica película de acción que te meten de todo por un tubo y no tiene un guión y una historia viable. El guión de esta película es sencillo, porque tampoco existen giros de guión exagerados o sorprendentes, algo que muchos directores creen efectivo en sus películas, y no siempre lo son. Es como ya he dicho la historia de un hombre que quiere recuperar su memoria, y va a seguir una evolución y un proceso para llegar a ello (en esta película no lo descubre todo, hay que continuar con la historia de Bourne para saber quien es realmente él). También es una película sobre la venganza, la venganza del protagonista por verse acorralado sin sentido de tal manera que solo puede defenderse. Doug Liman supo abrir el camino perfectamente para lo que después nos traería Paul Greengrass, rodando una buena película de acción y espías, con la dosis perfecta de acción y de thriller. En definitiva, algo muy bueno.

Si a esas trepidantes escenas de acción, les sumamos las luchas cuerpo a cuerpo de Jason Bourne con los respectivos personajes a los que se va enfrentando durante la película, ya tenemos algo redondo. Porque, para mi, el punto fuerte de estas películas es la manera en que han sabido coreografiar todas esas luchas y hacerlas mas creíbles de lo que pueden parecer en otra película. Damon lo da todo por el personaje, y eso se nota. En las dos siguientes, el nivel es aun mayor.
Ademas, tambien hay que sumarle la brillante BSO de John Powell, que es simplemente perfecta para la cinta (yo no puedo parar de esucharla) y un tema central de Moby que es genial ('Extreme Ways')

El reparto es perfecto. Yo aprendí a amar a Matt Damon con esta película, creo que fue con la cinta con la que le conocí y adore su personaje, porque sabe darle perfectamente el tono que requiere en cada momento: ya sea el tono letal de un asesino, en sus luchas o persecuciones; o bien el tono dramático que tiene que tener en los momentos oportunos. Es un gran actor, muy carismático, y muy hábil para cualquier tipo de papel, y aquí sin duda lo demostró con creces. Este es el papel que hizo a Matt Damon mundialmente conocido y al que me encantaría verlo una y otra vez en el cine porque no me cansaría. Franka Potente es otra actriz que me gusta bastante, me gusta su manera de actuar y en esta película esta perfecta, tiene buena química con Damon y eso es de agradecer, además que la historia amorosa no es pesada, para nada, y creo que tampoco molesta en la trama.

El resto del reparto esta muy bien también, haciendo perfectamente su trabajo y dándole un sentido muy bueno al film.

En definitiva, una gran película de espías, de esas que te hacen pasar un muy buen rato pero que a la vez las recuerdas durante mucho tiempo porque simplemente es perfecta. Además, Jason Bourne le metió miedo a James Bond y estos tuvieron que buscarse uno nuevo (Daniel Craig). Recomendable al 100% ya seas fan de películas de acción, de espías, del buen thriller y, porque no, de Matt Damon, porque como bien dice en la carátula del DVD ‘una película de acción y espías inteligente’.