martes, 20 de noviembre de 2018

Reto cinéfilo 2018 (4ª parte)




Seguimos con el reto, que hoy llega con una decepión mayúscula...




  • Una película de un director de una etnia diferente a la tuya: “The Lunchbox”.


The Lunchbox
(Dabba)


India, 2013; Duración: 104 min., Director: Ritesh Batra, Guion: Ritesh Batra, Música: Max Richter, Reparto: Irrfan Khan, Nimrat Kaur, Nawazuddin Siddique, Denzil Smith, Bharati Achrekar, Nakul Vaid, Yashvi Puneet Nagar, Lillete Dubey.
Premios:
2013: Festival Cannes: Semana de la Crítica - largometraje en concurso.
2014: Premios BAFTA: Nominada a Mejor película en habla no inglesa.
2013: Festival de Toronto (TIFF): Nominada al Premio del Público (Mejor película).
Género: romance, drama, drama romántico.

Sinopsis: En Mumbai, cada día, miles de amas de casa envían la comida a sus maridos a su lugar de trabajo a través de un eficiente y específico sistema de transporte. Un error en una de estas entregas pone en contacto a una joven con un hombre anodino. Juntos van construyendo un mundo de fantasía a través de notas que acompañan a la comida, lo que supone una amenaza para la vida real de cada uno. Esta película habla de la diferencia entre la vida que soñamos y la que vivimos, y del coraje que hace falta para convertir en realidad nuestras fantasías.


¿Por qué la he escogido?: casualidad de la vida, la acababan de traer a una de las filmotecas donde voy. Me atrajo al verla y como el director es indio (bueno, la peli entera) me venía bien para el reto.


Lo mejor: no tenía ni idea de que en la India las mujeres enviaban la comida a sus maridos en tuppers, en un sistema de transporte más eficaz que el de Amazon. Ellas preparan la comida y unos repartidores las recogen y sus maridos las tienen a punto para la hora del descanso para comer. Luego las recogen y las mujeres las reciben mucho antes de que sus maridos lleguen del trabajo. Es un sistema muy eficiente que hasta recibió visita de los ingleses para saber cómo funcionaba (hablo de verdad, es en serio).
Toda la película gira en torno a esta premisa, al equivocarse un repartidor y entregar el tupper a otra persona.
Una cinta con pocos personajes, importantes realmente dos: la mujer, insatisfecha con su vida y con un marido que pasa de ella y la engaña; y el hombre, un señor ya mayor, a punto de jubilarse y viudo. Ambos empiezan a cartearse y a hablar de sus vidas, como si de buenos amigos se tratase, para acabar llegando a algo más. Irrfan Khan y Nimrat Kaur están magníficos en sus papeles. Y no puedo dejar de mencionar a la tía de la protagonista, a la que nunca vemos pero siempre está ahí, vive en el piso de arriba y se comunican gritando un poco y con una cesta que cuelga de una ventana a otra. Sabios consejos los de la tía.
Y también está el joven compañero, interpretado por Nawazuddin Siddique entusiasta y con muchas ganas de vivir. El contrapunto más cómico de la cinta.
Estamos ante una película bonita y minimalista, que se ve con agrado. No es nada empalagosa y ofrece un retrato bastante realista de las relaciones y sentimientos de hoy en día (estés en la India o donde sea). Además, su agudo sentido del humor le suma puntos.
Además, ahí está el fiel retrato de Bombay, de sus calles, de sus gentes, de sus costumbres. Y de su comida, por supuesto. La película da hambre.

Lo peor: Irrfan Khan está estupendo en su actuación, que conste. Pero no da el pego como hombre de más de 60 años a punto de jubilarse. Por eso hace que cueste entender que nunca quiera dar el paso para conocerla (según él, es muy mayor, pero no a los ojos del espectador. Hay que tener en cuenta que cuando hizo la película tenía 51 años).
Y quizás, para algunos espectadores, su final tan abierto (más bien es un ‘no final’) y su, definitivamente, cero estilo Hollywood de romances y finales felices, no les convenza.

Conclusiones: creo que nunca lo he contado, pero adoro la India. Me atrae muchísimo. Sus gentes, su historia, sus religiones, su color… todo. Y me ha encantado ver esta película, tan sencilla y a la vez tan atractiva. Con dos actores protagonistas estupendos y una historia de amor tan alejada de los cánones americanos. Esta es toda naturalidad.
Si os apetece ver algo diferente, dadle una oportunidad.





  • Una película sobre una familia: “El castillo de cristal”.


El castillo de cristal
(The Glass Castle)


EEUU, 2017; Duración: 127 min., Director: Destin Cretton, Guion: Marti Noxon, Andrew Lanham (Libro: Jeannette Walls), Música: Joel P. West, Reparto: Brie Larson, Naomi Watts, Woody Harrelson, Max Greenfield, Sarah Snook, Josh Caras, Charlie Shotwell, Iain Armitage, Ella Anderson, Shree Crooks, Sadie Sink, Eden Grace Redfield, Dominic Bogart, Alanna Bale, Andrew Shaver, Brigette Lundy-Paine, Kyra Harper, Joe Pingue, Nathaly Thibault, Darrin Baker.
Género: drama, biográfico.

Sinopsis: Una joven crece en una familia disfuncional de nómadas inconformistas, con una madre excéntrica y un padre alcohólico que distrae a los niños con su imaginación para que ignoren su pobreza. Basada en las memorias de Jeanette Walls.


¿Por qué la he escogido?: casualidad, la vi y cuadró para el reto. No la busqué, ella llegó a mí.



Lo mejor: sin ningún tipo de dudas, el grandísimo Woody Harrelson y sus siempre estupendas actuaciones. Él es la película, su interpretación de padre nómada y alcohólico (pero que adora a sus hijos) es brutal. Le coges cariño aun sabiendo que es un caradura. Pero eso es lo que requiere la cinta, hacerte sentir como se siente su hija. Que quiere salir de ese tipo de vida y alejarse de sus padres, pero a la vez le adora.
Pero no solo Woody está de diez, Naomi Watts lo hace estupendamente. En este caso, como la madre nómada. Y Brie Larson es la hija que quiere salir de ese tipo de vida y también lo borda. Al igual que todos los que hacen de niños en diferentes edades. Sinceramente, es una película de estupendas interpretaciones (y buenos personajes) que da gusto ver.
Sigue la estructura de una road movie con unos padres con una manera diferente de criar a sus hijos (muy del estilo deCaptain Fantastic, pero con menos comedia que aquella y más drama). Me gustan mucho este tipo de películas, con personajes marginados que viven una vida muy diferente a la acomodada y estable que lleva la mayoría de la gente en el mundo desarrollado. Con pinceladas de humor, tierna y dura, y sin llegar jamás al sentimentalismo ni a la sensiblería.
Estupendo relato, y carta de amor, de la protagonista a su padre.

Lo peor: nada.

Conclusiones: no sabía muy bien a que me enfrentaría cuando me la puse, pero me ha encantado. Las historias de personajes reales y marginales siempre me han atraído. Si podéis, os recomiendo verla. Aunque solo sea por ver a un estupendo Woody y al resto del reparto.
Por cierto, la cinta está basada en hechos reales y en la novela que ella escribió sobre su infancia.





  • Una película sobre alguna enfermedad: “Despertares”.


Despertares
(Awakenings)


EEUU, 1990; Duración: 121 min., Director: Penny Marshall, Guion: Steven Zaillian (Libro: Oliver Sacks), Música: Randy Newman, Reparto: Robert De Niro, Robin Williams, Julie Kavner, Ruth Nelson, John Heard, Penelope Ann Miller, Alice Drummond, Judith Malina, Barton Heyman, George Martin, Anne Meara, Richard Libertini, Steve Vinovich, Bradley Whitford, Max von Sydow, Peter Stormare, Vin Diesel.
Premios:
1990: 3 nominaciones al Oscar: Mejor película, actor (Robert De Niro), guión adaptado.
1990: Círculo de Críticos de Nueva York: Nominada a Mejor actor (Robert De Niro).
1990: Sindicato de Productores (PGA): Nominada a Mejor película.
1990: Sindicato de Guionistas (WGA): Nominada a Mejor guión adaptado.
Género: drama, melodrama, basado en hechos reales.

Sinopsis: A finales de los años sesenta, el doctor Malcolm Sayer (Robin Williams), un neurólogo neoyorquino, decide utilizar un medicamento nuevo para tratar a sus pacientes de encefalitis letárgica, enfermedad que priva de las facultades motoras a las personas que la padecen hasta reducirlas a un estado vegetativo. Poco a poco empezará a manifestarse cierta mejoría en los pacientes, especialmente en Leonard Lowe (Robert de Niro).



¿Por qué la he escogido?: no me gustan nada las películas sobre enfermedades… ¡pero nada! Pero bueno, me encontré con esta y como salían Robert de Niro y Robin Williams, de perdidos al rio…


Lo mejor: impresionante Robert De Niro en su actuación, siempre está genial, pero aquí borda al enfermo al que interpreta. Su expresión corporal al imitar los movimientos es brutal, parece que de verdad los parezca… impresionante. No sé cómo no ganó el Oscar.
Y Robin Williams, también está estupendo. Con ese personaje tan él, de chico tímido y de gran corazón capaz de hacer grandes cosas. Los dos hacen un estupendo dúo en pantalla. Los personajes secundarios también resultan muy carismáticos.
Es una película que, aunque es típica y muy del gusto de los americanos, se ve del tirón gracias a sus magníficos intérpretes. Más que una historia real, parece una fábula de triste final (unos pacientes que ‘vuelven a la vida’ milagrosamente, pero que acabarán volviendo a su estado). Pero resulta bonita, está muy bien hecha, te da que pensar y se ve con gusto.
Me gustan estas historias que explican el origen de una enfermedad, en este caso, de la encefalitis letárgica que atacó a mucha gente entre los años 1917 y 1920. Y que nunca ha vuelto a aparecer.

Lo peor: es sensiblera y tramposilla, pero es un melodrama y son así.
Cuesta creer que fuese una historia real y que unos pacientes postrados en cama más de 30 años se levantasen como si nada y hasta se fuesen a bailar. Luego ya me puse a leer lo que ocurrió de verdad y, efectivamente, no pasó así. Sí, despertaron, pero no de la manera mágica y maravillosa de la película.

Conclusiones: dan mucho que pensar estas enfermedades y después de ver la película es casi imposible no buscar información…
Vale la pena verla por ver las geniales actuaciones de De Niro y Williams, pero también para conocer este curioso caso que sucedió en los años 60.





  • Una película que te hayan prestado o regalado: “Encuentros en la tercera fase”.


Encuentros en la tercera fase
(Close Encounters of the Third Kind)


EEUU, 1977; Duración: 132 min., Director: Steven Spielberg, Guion: Steven Spielberg, Música: John Williams, Reparto: Richard Dreyfuss, Teri Garr, Melinda Dillon, François Truffaut, Cary Guffey, George DiCenzo, Bob Balaban, J. Patrick McNamara, Shawn Bishop, Lance Henriksen.
Premios:
1977: 2 Oscar: Fotografía, Edición sonora (especial). 8 (7+1 especial) nominaciones.
1977: Globo de Oro: 4 nominaciones a Mejor Drama, Director, Guión, Música.
1977: Sindicato de Directores (DGA): Nominada a Mejor director.
1977: Sindicato de Guionistas (WGA): Nominada a Mejor guión original drama.
1977: Premios David di Donatello: Mejor film extranjero.
1977: Círculo de Críticos de Nueva York: Nominada a Mejor película y director.
1978: Premios BAFTA: Diseño prod./Dir. artística. 9 nom., incluyendo Película y Director.
Género: ciencia-ficción, fantástico, intriga.

Sinopsis: Una noche, cerca de su casa, en Indiana, Roy Neary (Richard Dreyfuss) observa en el cielo unos misteriosos objetos voladores. Desde entonces vive tan obsesionado por comprender lo que ha visto que se distancia de su esposa (Teri Garr). Encuentra apoyo en Jillian Guiler (Melinda Dillon), una mujer que también ha sido testigo de los mismos hechos. Juntos intentan encontrar una respuesta al misterio que ha alterado sus vidas. Al mismo tiempo, un nutrido grupo de científicos internacionales, bajo la dirección de Claude Lacombe (François Truffaut), empieza a investigar las apariciones de ovnis y otros extraños fenómenos.




¿Por qué la he escogido?: esta fue fácil, me la regaló Raquel, y es una de esas cintas ya casi clásicas que tengo pendientes por ver. Así que…


Lo mejor: no me lo puedo creer, pero no sé qué escribir aquí. La película me ha aburrido tanto… lo único que me ha gustado es la BSO. ¡Ah! Y darme cuenta de todas las referencias de “Los Simpson” que apuntaban a esta película. Pero poco más me ha aportado…

Lo peor: me costó la vida verla, ya desde el principio me dio mala espina, aquello no me enganchaba y conforme fueron pasando sus eternos 132 minutos aquello estaba claro que no era para mí. Dos tíos obsesionados con el arte, uno con la escultura y la otra pintando. Así durante 1h y media casi, la manera de mostrarnos como a él se le va la pinza y hace ‘obras de arte’ con todo me desesperaba, el tío me caía mal y si yo hubiese sido su mujer, lo mato, por pesado, insoportable y monotemático. Pero en fin, que aparte del principio, que tiene algo más de interés y da a entender que podría ser mejor pero no es así, el resto de la película es un preámbulo larguísimo, de lo que pensé, sería un final digno, al menos. Pues no, error, es otro peñazo. Cuando por fin llegan los cutre-marcianitos, vienen y nos dicen cuatro tonterías con la musiquita (que al principio me gustaba, pero a estas alturas la estoy empezando a odiar), devuelven a los soldados aquellos perdidos y se piran. Y mi cara era un poema mientras lo veía.
Todavía no entiendo si los toques cómicos de la cinta son aposta o se hicieron sin querer.
Y los actores, en fin, nada del otro mundo. O yo les cogí tanta manía porque me aburría y me cabreaba a la vez que no podía fijarme en mucho ya.

Conclusiones: esta es la típica película de la que todos hablan maravillas y cuando por fin la ves, te das cuenta que eres ¿la única? persona que le ha parecido un peñazo. ¿En serio os parece tan obra maestra? ¿Soy la única que se dormía? En realidad, mi padre me comentó que fue a verla de estreno en su día y casi se sale del cine, así que igual va en los genes. En mi familia tenemos amor-odio por Spielberg, odiamos “ET” por ejemplo, que es otra que la gente idolatra.
Quizás la clave fue verla en su época y rememorarla ahora, no verla por primera vez. O quizás simplemente está sobrevalorada y nadie se atreve a admitirlo (yo misma ni me he atrevido a suspenderla en filmaffinity, le he cascado un 5). O en su época marcó y ahora está desfasada… En fin, ya la he visto, y no me ha gustado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario