lunes, 28 de abril de 2014

Ocho apellidos vascos - 'Emilio Martinez-Lázaro consigue una gran comedia con la que no pararás de reir'









Titulo Original: Ocho apellidos vascos
Año: 2014
Duración: 98 minutos
País: España
Director: Emilio Martínez-Lázaro
Guión: Borja Cobeaga, Diego San José
Música: Fernando Velazquez
Reparto: Dani Rovira, Clara Lago, Carmen Machi, Karra Elejalde, Alfonso Sanchez, Alberto Lopez, Aitor Mazo, Lander Otaola








Rafa (Dani Rovira) es un joven señorito andaluz que no ha tenido que salir jamás de su Sevilla natal para conseguir lo único que le importa en la vida: el fino, la gomina, el Betis y las mujeres. Todo cambia cuando conoce a la primera mujer que se resiste a sus encantos: es Amaia (Clara Lago), una chica vasca. Decidido a conquistarla, se traslada a un pueblo de las Vascongadas, donde se hace pasar por vasco para vencer su resistencia. Adopta el nombre de Antxon y varios apellidos vascos: Arguiñano, Igartiburu, Erentxun, Gabilondo, Urdangarín, Otegi, Zubizarreta e incluso Clemente.


Tengo que admitir que yo no soy mucho de cine español, y ya si es de ir al cine a verlas, pues aun menos. Se que no esta bien, y que nosotros mismos deberíamos apoyar al cine español, pero es que no me llama la atención, salvo algunas excepciones que hacen que tenga ganar de ver alguna película, ya sea por el boca a boca, o porque me interesa de verdad lo que me enseñan. También tengo que admitir que últimamente el cine español ha sufrido una ‘reconversión’, y ha demostrado a mucha gente (incluida a mí) que puede ir más allá de lo que todos tenemos pensado. Con esta película me paso lo primero que dije antes: el boca a boca. Críticas muy positivas, sobre todo por la gente que ya la había visto, hicieron que me animara (gracias a mi madre también) a ir a verla, y no me arrepiento de haberlo hecho. De entrada tengo que decir que no es una película perfecta, pero cumple con su cometido: hacernos reír sin parar.

Rafa es el típico tío andaluz que lo único que le interesa son las mujeres, el buen vino, y, por supuesto, el futbol. Nada se le resiste. Conoce a Amaia, una chica vasca que no es nada amigable, sobre todo con los andaluces. Entre ellos comenzará una extraña relación, y es que Rafa tiene que hacerse pasar por su novio ante el padre de Amaia. Es entonces cuando comienzan una serie de locuras que desembocará en lo que ninguno de los dos quería. Todo esto, obviamente, sin olvidar los ocho apellidos vascos de rigor.

Muchos pensarán de donde viene el éxito de esta película, y es que no es de extrañar. Ante todo, no deja de
ser una comedia romántica, de esas con las que los americanos nos bombardean a cada momento, con caras que ya están atadas a este tipo de películas, y con una serie de chistes que no siempre nos divierten (bien porque no las entendemos o porque no tienen la mas minima gracia). ‘Ocho apellidos vascos’ sigue la misma línea de esas películas, con dos personajes que luchan por un ‘amor imposible’. La diferencia es que esta cinta esta repleta de chistes y chascarrillos a los que no nos podemos resistir. Y es que no hay ninguno que no lleguemos a entender, y con la gracia de los actores que dan vida a estos personajes, aun más. No busca ser inteligente, no buscar trascender por ser original, simplemente busca la risa fácil en el espectador, el evadirnos durante un rato de nuestros problemas. Esta vez realmente lo consigue, es graciosa, muy graciosa, y en ocasiones se olvida del romanticismo más clásico para regalarnos escenas de lo más divertidas. Es cierto que en ocasiones puede resultar algo ñoña, cuando esa parte romántica entra en escena (como el final), pero apenas te das cuenta de ellos entre tanta carcajada.

Pero hay que ser realista. No es una gran película. No tiene los números para convertirse en una de las mejores películas que se han hecho en España, porque no es original, no es nada nuevo, no es algo que nunca hayamos visto. Es una comedia romántica al uso (no soy yo de estas películas demasiado), pero han sabido llevarla por un camino distinto al que estamos acostumbrados, es decir, pasa del romanticismo del que antes hablaba, con ñoñerias las justas, y nos deleitan con una sucesión de escenas surrealistas que harán que no puedas parar de reírte. Todo ello a costa de los tópicos de andaluces y vascos, llevados hasta el extremo. Puede que a los susodichos les moleste, pero es que si nos ponemos así, a todos nos puede molestar los tópicos de cada ciudad. Aquí en Toledo somos conocidos por ser un poco ‘atravesaos’ (dicho así, tal cual), pero eso no conlleva a que todos sean así. Todos somos sabemos como son los andaluces, y obviamente también sabemos como son los vascos. Nos muestra la chulería de unos, sabiéndose capaces de conseguir todo lo que se proponen, y la ‘brutez’ de los vascos. La película no pretende criticar a nadie, y aunque en algunas escenas pueda resultar un poco atrevida, sale del paso muy bien, son revuelo, y dejándonos con una sonrisa de oreja a oreja tras salir del cine.

La elección del reparto esta muy acertada. Dani Rovira es una debilidad para mi, desde que le conocí haciendo monólogos en el Club de la Comedia. Y es que lleva la gracia en la sangre, ya sea por su expresividad o por su salero a la hora de hablar. Da igual, es un crack, y en su salto al cine no ha perdido nada de esa frescura que siempre nos trae con sus monólogos. Si sigue por este camino, tendrá un gran futuro en la comedia (y quien sabe, quizás hasta se le de bien el drama). También merecen mención la pareja de amiguetes de Rafa (ambos vistos en ‘La Hora de José Mota’) y son una de las cosas que mejor funcionan en la película. Necesitan más protagonismo, lo estamos pidiendo todos a gritos. Luego tenemos a Clara Lago, que demuestra que es una chica con un gran talento, con una química brutal con Dani. Y luego están Carmen Machi y Karra Elejalde, que cumplen muy bien con su papel, en el caso de Karra dándole a su personaje una humanidad que nos hace ver que los tópicos no están tan arraigados como pensamos.


En definitiva, una película que hace pasar un rato muy agradable, con mucha gracia, llevada de muy buena manera, y que aunque no sea una gran película, si que, gracias a su buen trabajo, se ha convertido en todo un fenómeno de masas.






1 comentario: