Titulo original: Rampage
Año: 2018
Duración: 107 minutos
País: Estados Unidos
Director: Brad Peyton
Guion: Ryan Engle, Ryan Condal, Carlton Cuse
Música: Andrew Lockington
Reparto: Dwayne Johnson, Tessa Thompson, Jeffrey Dean Morgan, Malin Akerman, Joe Manganiello, Marley Shelton, Jake Lacy, Jack Quaid, Breanne Hill, Matt Gerald, P.J. Byrne, Destiny Lopez, Jason Liles...
El primatólogo Davis Okoye (Johnson), un hombre que mantiene las
distancias con otras personas, tiene un sólido vínculo con George, el
extraordinariamente inteligente gorila de espalda plateada al que ha
estado cuidando desde que nació. Pero cuando un experimento genético
sale mal, este apacible simio se convierte en una enorme y embravecida
criatura. Para empeorar más las cosas, pronto se descubre que existen
otros animales con la misma alteración, y estos depredadores alfa recién
creados comienzan a arrasar Norteamérica destruyendo todo lo que
interpone en su camino.
Os voy a contar un secreto; pero es uno de esos secretos
que no te da miedo confesar, porque no son horribles, ni oscuros, ni nada por
el estilo (en este momento estaréis pensando que a ver que nos va a contar
esta, pero ya os digo yo que os vais a sentir decepcionados, porque es una tontería).
En fin, que me lio, mi secreto: me encanta Dwayne Johnson. Se que no es el
mejor actor del mundo, y que en la mayor parte de sus películas actúa en modo
piloto automático, pero oye, yo le adoro, me parece un tío de lo mas carismático.
Supongo que este amor que siento por el viene del wrestling, de la WWE, donde
una servidora le conoció; el caso es que su paso al cine era mas que obvio (se
le veía mucho potencial en el ring, sobre todo con el micrófono; si nunca habéis
visto sus promos, hacedlo, merece la pena), es por eso que siempre me lo paso pipa
viéndole en pantalla. Si encima a eso le sumamos que el tío se relaciona con un
gorila gigante y que Jeffrey Dean Morgan pulula por allí también, ¿Qué más se
puede pedir?
No esperaba yo gran cosa de esta película, porque bueno,
ya se sabe, sale Dwayne Johnson. Se que antes lo he puesto por las nubes y demás,
pero seamos sinceros, sus películas no es que sean lo mejor que te puedes echar
a la cara, cintas de estas que te toquen la patata, o dramones de estos de
llorar a moco tendido. Que va, al contrario, lo que este señor hacer siempre
son cintas para el entretenimiento del espectador, nada más. ‘Proyecto Rampage’
no iba a ser menos, y más si te paras a leer un poco la sinopsis. El caso es
que, obviando que el guion es muy simple, plano y en muchas ocasiones estúpido,
y que hay algunos personajes que bien poquito hacen en escena y sobran más que
hacer algo productivo, es entretenida y divertida como ella sola. La historia
es trepidante de principio a fin, con mucha acción y muchos efectos especiales;
tiene escenas que te dejan con la boca abierta, aunque te preguntas si es por
lo divertida que es o porque simplemente te deja en shock (no porque sea buena,
si no porque es imposible), pero ya se sabe, en este tipo de películas todo
vale, y cuanto más exagerado, mucho mejor para el espectador, que sale con una
sonrisa en la boca del cine. No vas a ver la mejor película del año, vale, pero
que demonios, te lo pasas en grande, y eso es lo que se necesita a veces. ¡No
deja de ser un blockbuster!
Ahora bien, el simple carisma de Jonhson no va a hacer
que una película sea notable o buena, que va, por mucho que lo intente (y mira
que lo hace) él solo no puede levantar una película por si mismo, y esta tiene
muchos fallos. Como ya he dicho antes el guion es muy sosainas, y repletos de tópicos
del genero de acción-aventuras, sin novedad ninguna, y con el protagonista
siendo un pedazo de héroe que te hace preguntarte si es que el también esta
modificado genéticamente, porque no es normal que sobreviva a algunas cosas que
le pasan. Luego tenemos los efectos especiales. En la mayor parte de la película
están bien, sobre todo cuando se refiere a destrucción de la ciudad, pero en
algunas escenas chirria de una manera espantosa, mas teniendo en cuenta lo
buenos que están siendo en la mayor parte de la cinta (la escena exacta es
cuando están en el paracaídas…). Y luego tenemos personajes totalmente
desaprovechados, no solo el de Tessa Thompson, que sí, que es muy científica,
pero no aporta apenas nada a la trama, porque Johnson se vale el solito, si no también
el de Jeffrey Dean Morgan, que está allí simplemente para lucir palmito y
dejarnos ver lo que mola.
Por supuesto, toda esta historia, como no podría ser de
otra manera, tiene una moraleja, y es que claro, los humanos somos horrible (y
es cierto, lamentablemente), y el karma es muy sabio: si andas modificando genéticamente
a los animales, o inventando patógenos que los hace ser letales, es normal que
luego se descontrole todo; nada nuevo bajo el sol. Con esto quiero decir que,
como es lógico, el malo sigue siendo el mismo de siempre, y encima nos muestra
lo tontos que los humanos podemos llegar a ser. ¿No aprenderemos nunca del reino
animal?
Esta es una de esas películas perfectas para tardes de
relax, para esos días en los que te apetece ver una película, pero no te
apetece pensar demasiado, ni que te hagan sufrir en exceso, simplemente
entretenerse y divertirse, ni más ni menos. Además, admitidlo, también os gusta
Dwayne Johnson.
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