miércoles, 16 de enero de 2013

Warrior - 'Cuando tu vida depende de tu destreza en el ring'





Título Original: Warrior
Año: 2011
Duración: 140 minutos
País: Estados Unidos
Director: GavinO’Connor
Guión: Gavi O’Connor, Anthony Tambakis, Cliff Dorfman (Historia: Gavin O’Connor, Cliff Dorfman)
Música: Mark Isham
Reparto: Joel Edgerton, Tom Hardy, Nick Nolte, Jennifer Morrison, Kevin Dunn, Bryan Callen, Liam Ferguson, Frank Grillo, Kurt Angle, Maximiliano Hernandez, Noah Emmerich
Premios: 2011: Oscars: nominado a mejor actor de reparto (Nick Nolte)
2011: Screen Actors Guild: mejor actor de reparto (Nick Nolte)
2011: Critics Choice Awards: mejor actor de reparto (Nick Nolte)
2011: Satellite Awards: mejor actor (Hardy), mejor secundario (Nolte) y mejor montaje






Drama ambientado en el mundo de las artes marciales mixtas. Un veterano de Vietnam (Nolte) abandona el boxeo para trabajar en una fundición de acero. Sus graves problemas con el alcohol han destrozado a su familia, pero llega un momento en que, arrepentido, deja la bebida y decide entrenar a su hijo más joven (Tom Hardy) para que participe en un torneo de artes marciales, en el que se enfrentará a su hermano mayor (Joel Edgerton). 


En muchas ocasiones, aparecen películas que por unas cosas u otras pasan desapercibidas para el resto del mundo, y quizás solo se conocen bien en el país del que vienen (en este caso de EEUU). Lamentablemente, cuando llegan a nuestro país es demasiado tarde, años después de su estreno, y la cinta pasa sin pena ni gloria. Y es realmente una pena, porque a veces te encuentras con pequeñas joyas, como esta, que te hacen disfrutar del cine y de todo lo que conlleva. Además si eres fanático de las artes marciales, boxeo, lucha libre o similares, esta es tu película.

Voy a dar las verdaderas razones por las que yo vi esta cinta. En un primer momento alguien me la recomendó (debido a mi gusto por la lucha libre y tal). Después ya vi que Tom Hardy aparecía en ella, y eso hizo que ganara muchos más puntos. Pero no fue hasta que descubrí que el otro protagonista era Joel Edgerton cuando ya decidí por fin verla. Y gracias a dios que lo hice, porque es una de esas películas que con verlas una sola vez se convierten en una de tus cintas predilectas, de esas que las pones en tu lista de favoritas. Y sin duda, para mí, esta lo es. Así que doy las gracias al amigo que me la recomendó.

La historia nos sitúa en EEUU. Hay una competición de artes marciales mixtas llamada Sparta. En ella participan todos los pesos pesados de este deporte. Dos hermanos, que no es que se lleven demasiado bien y que llevan años sin verse, participan también en la competición: uno, que vuelve a hablarse con su padre, que es su entrenador, lo hace por el simple hecho de amar ese deporte; el otro, porque su familia se ve atrapada en muchos gastos y necesitan el dinero. En ella no solo descubrirán quien es el mejor luchador de los dos, sino que también descubrirán todos los sentimientos que giran en torno a ellos.

Se puede decir que hay varias historias diferentes en una solo, se cuentan varias cosas juntas que finalmente van a acabar todas en lo mismo: las artes marciales. Todas confrontan para llegar a ese final, donde se solucionan o descubren, dependiendo de lo que toque. Por encima de muchas de ellas, esta la familia, desde varios puntos de vista, pero la familia, al fin y al cabo. Las cosas que la gente es capaz de hacer por el cuidado de su familia, de su gente, por recuperar el amor de un hijo, de un hermano; por saber perdonar, por disculparse, por ser alguien mejor. Y que mejor manera de resolver todos los problemas en un cuadrilátero, o en una jaula, en este caso.
No sabes realmente con que hermano te quedas, no sabes con cual estás de acuerdo y con cual no, porque cada uno tiene su historia, cada uno tiene sus objetivos, sus problemas, y su manera de resolverlos. Ambos son héroes. Ambos lo tienen todo y a la vez nada, hay vacios en su vida que, aunque no quieran admitirlo, necesitan llenarlos.

Es una cinta dura, sobre todo por la manera en que la tratan. Las luchas son luchas, nada más. Eso piensan algunos. En mi opinión simbolizan la dureza de la vida, los obstáculos a los que nos tenemos que enfrentar cada día, y que no hay manera que no sea luchar para resolverlos. Aquí los hacen más gráficos, se sirven de lo físico para explicárnoslo, y, qué coño, te hace disfrutar mucho, pura adrenalina en cada momento.
Las luchas están coreografiadas a la perfección, los actores se meten en su papel de la mejor manera, y sientes cada golpe que se dan, ya sea real o metafórico. No te deja apartar la vista de la pantalla en ningún momento. Saben equilibrar perfectamente las escenas de lucha con las de drama, sin caer demasiado en ninguna de ellas. Perfecto en ese sentido.

Los actores protagonistas están fantásticos. Tom Hardy está demostrando ser un gran actor, le pongan en el papel que le pongan, ya suponga un reto para él o no, porque te hace quererle, te enamoras de sus personajes y ya necesitas ver más sobre él. Joel Edgerton era un actor (australiano tenía que ser) del que yo apenas conocía mucho, pero su interpretación en la película es sencillamente fantástica. Es más, ahora sí que necesito ver más de él, porque es una barbaridad. Jennifer Morrison quizás sea un poco el papel flojo del filme. No es que no pinte nada, pero tampoco aporta demasiado, lástima, porque odio que los personajes femeninos siempre sean el típico de ‘mujer florero’. Aunque este imprime fuerza y carácter, a pesar de todo. ¿Y qué se puede decir de Nick Nolte? Pues es un genio de hombre. Su interpretación es magnífica, puedes ver realmente todo lo que siente, su desesperanza y su deseo de recuperar a la familia que el alcohol le ha quitado (la escena en la que esta borracho es brutal). Un elenco perfecto, para una película perfecta.



¿Qué si tengo alguna pega para la película? No, ninguna, me ha parecido sensacional, y espero que la gente se anima a verla, porque es maravillosa.
Como dato curioso decir que ha sido un placer ver a Kurt Angle en acción. Siempre me encanto en la WWE/F, en sus feudos con Stone Cold Steve Austin, y su particular personalidad encima del ring. Por eso es que cada vez que salía, en mi cabeza no podía parar de sonar el ‘You Suck!’ de su música de entrada.

Recomendable al 100%, si te gusta este tipo de cine, más aun, porque es una pequeña joya que, sin duda, no dejará indiferente a nadie. 




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