Bueno, vuelvo por aquí con una de mis limpiezas de disco duro habituales, ¿la extrañabais? Es que, cuando tengo meses en los que me centro más en ver películas para ir haciendo el reto cinéfilo del año, esta entrada se resiente más (especialmente, porque muchas veces las que podrían meterse aquí se van al reto).
Pero aquí estoy, ¿nos ponemos ya con ellas? Que hoy viene muy variadita.
Los blancos no la saben meter
(White Men Can't Jump)
EEUU, 1992; Duración: 115 min., Director: Ron Shelton, Guion: Ron Shelton, Música: Bennie Wallace, Reparto: Woody Harrelson, Wesley Snipes, Rosie Pérez, Tyra Ferrell, Cylk Cozart, Kadeem Hardison, Ernest Harden Jr., John Marshall Jones, Jeanne McCarthy.
Género: comedia, deporte.
Sinopsis: Billy y Sidney son dos amigos, uno blanco y otro negro, que se dedican a practicar el baloncesto callejero contra todo aquel que desee medir sus fuerzas con ellos. Como los dos se creen los mejores jugadores del mundo, su excesivo ego hace que se peleen entre ellos, con los contrarios y con todo aquel que no comparta su filosofía del juego.
Lo mejor: ¡el dúo formado por Woody Harrelson y Wesley Snipes es la caña! Los dos tienen muy buena química y transmiten muy buen rollo. Desde luego, son el punto fuerte de la película, sin ellos y lo bien que se llevan, no valdría la pena. También hace el carisma de los personajes a los que dan vida, por supuesto. Y los secundarios también hacen muy buen papel.
Tiene momentos muy divertidos, buen sentido del humor (hay diálogos geniales), buenas escenas de baloncesto (¡oye! qué bien juegan Woody y Wesley) y está muy bien ambientada (jerga de la calle y del baloncesto callejero incluido, con muy buena adaptación en el doblaje español). Además, no teme meterse con blancos y con negros, hay chistes para todos.
Lo redondea todo un guion ágil, lo amena que resulta para el espectador y el buen rollo que genera al verla.
Tiene momentos muy divertidos, buen sentido del humor (hay diálogos geniales), buenas escenas de baloncesto (¡oye! qué bien juegan Woody y Wesley) y está muy bien ambientada (jerga de la calle y del baloncesto callejero incluido, con muy buena adaptación en el doblaje español). Además, no teme meterse con blancos y con negros, hay chistes para todos.
Lo redondea todo un guion ágil, lo amena que resulta para el espectador y el buen rollo que genera al verla.
Lo peor: pues quizás que si quitas a sus dos estupendos protagonistas, se te queda una película sencilla y nada del otro mundo.
Conclusiones: llevo viendo esta caratula en el videoclub desde niña y su título me hacía mucha gracia, se me quedó grabado. Hace ya tiempo que la guardé en mi disco duro para ponerme con ella y un buen día de 2018 le llegó su turno. Y oye, no sé porque esperé tanto, es muy divertida. Me lo pasé muy bien viéndola y os animo a poneros con ella si no lo habéis hecho aún. Un buddy film en todo regla con un Woody y un Wesley estupendos y con mucha química. Y no importa si no os gusta el baloncesto, se disfruta igual.
Besos de vampiro
(Vampire's Kiss)
EEUU, 1989; Duración: 103 min., Director: Robert Bierman, Guion: Joseph Minion, Música: Colin Towns, Reparto: Nicolas Cage, Maria Conchita Alonso, Jennifer Beals, Elizabeth Ashley, Kasi Lemmons, Bob Lujan, Jessica Lundy, Johnny Walker, Boris Leskin, Michael Knowles, John Michael Higgins, Jodie Markell, Marc Coppola, David Hyde Pierce, Amy Stiller.
Premios:
1989: Festival de Sitges: Mejor actor (Nicolas Cage).
1989: Premios Independent Spirit: Nominada a Mejor actor (Nicolas Cage).
Género: drama, comedia, comedia negra.
Sinopsis: Un agente literario de Nueva York, empieza a comportarse de forma muy extraña, a raíz de la visita de una misteriosa joven. Está obsesionado con la idea de que la joven es un vampiro y que ésta le ha mordido. A medida que las visitas se repiten, aumentan sus trastornos.
Lo mejor: no sé por dónde empezar, me parece tan absolutamente fantástica que me cuesta escribir de todo lo que me ha gustado de ella.
Tiene tantas escenas míticas… desde que vi la película por primera vez, a ahora, que publico esto, he vuelto a ver muchos de sus pasajes varias veces. Sigue pareciéndome una pasada. Esa loca y degenerada obsesión que va creciendo en él me fascina. La escena en la que llama a la secretaría repetidamente e insistentemente y sale corriendo a por ella (no sin antes dar un salto del suelo a la mesa, de lo más espectacular y natural que he visto) es sublime. No os digo ya nada de la escena de cuando se come una cucaracha. Dato: se la come de verdad. Ya me pareció a mi muy real… luego fue cuando leí que fue idea suya añadir esa escena y comerse una vivita y coleando (tres intentos le costó hacerlo). La escena, obviamente, está inspirada en uno de los personajes de la novela “Drácula”. Pero puedo seguir, sus conversaciones con la psicóloga son de aúpa, y su forma de recitar el abecedario, para explicar que no entiende como alguien no sabe catalogar los archivos por orden alfabético permanecerá por siempre en mi memoria. Al igual que la escena del ataúd que se construye en casa con su sofá y como se compra unos dientes falsos de vampiro (es que claro, él está seguro de ser un vampiro, pero no le crecen los colmillos) y mata con ellos a una chica en una disco. Tampoco puedo olvidar su monologo final, ya demente perdido, mientras vuelve a su casa.
Nicolas Cage está estupendo, de verdad, hace un papel increíble. De esos tan excéntricos y complicados que le gusta interpretar (especialmente, en su época de actor de cine independiente, claro). Se mete de lleno en el papel y la evolución hacia la locura total es estupenda. Esa forma de cada vez andar más encorvado y con los brazos hacia afuera y los dedos estirados (como Nosferatu, película que su personaje ve en televisión), la cara de loco, el tono de voz… es que lo borda, punto.
Además, amén de sus múltiples referencias al cine de vampiros y jugar un poco a pertenecer a ellas, no deja de ser un viaje a la mente de una persona esquizofrénica. Mientras que el cada vez se cree más que es un vampiro, el espectador puede ver que no es así.
En fin, entretenida de principio a fin y muy original. Llena de escenas míticas y con un Nicolas Cage estupendo.
Lo peor: nada de nada, es perfecta en su imperfección.
Conclusiones: llevaba ya tiempo en mi disco duro, es de esos clásicos de culto con críticas dispares que me encanta ver. Y es que a la película, o la adoras o la detestas, no hay término medio. Además, es indispensable también que te guste el bueno de Nic.
Yo tuve una época en la que él no me gustaba, pero ahora no comprendo que me pasó, y estoy recuperando el tiempo perdido. ¡Si él es fantástico! Es el típico buen actor, y excéntrico hasta decir basta, que tanto me gusta.
Y yo nunca me pierdo una película con vampiros (por norma general, hay flagrantes excepciones que todos imaginareis).
Si podéis, echadle un ojo. Para mí, ha sido uno de los grandes descubrimientos de este año. Y con el que definitivamente, me declaro absolutamente fan del bueno de Cage.
Doomsday: El día del juicio
(Doomsday)
(Doomsday)
Reino Unido, 2008; Duración: 105 min., Director: Neil Marshall, Guion: Neil Marshall, Música: Tyler Bates, Reparto: Rhona Mitra, Malcolm McDowell, Bob Hoskins, Alexander Siddig, Nora-Jane Noone, Sean Pertwee, Rick Warden, David O'Hara, Adrian Lester, Martin Compston, Lee-Anne Liebenberg.
Género: ciencia-ficción, acción, thriller, gore.
Sinopsis: Gran Bretaña, 2007. El letal virus "Reaper" ha aniquilado a cientos de miles de personas. El gobierno británico decide evacuar a los supervivientes sanos y rodear con una muralla el área afectada para evitar la huida de los infectados. Cuando, treinta años después, el virus reaparece, el gobierno envía a la zona un equipo de especialistas de élite, dirigido por el Mayor Eden Sinclair, con la misión de obtener una vacuna a cualquier precio. Aislado del resto del mundo, el equipo deberá trabajar en medio de un paisaje de pesadilla.
Lo mejor: es tan cutre, tan copia descarada de todo, tan parida de proporciones bíblicas, que solo puedes quererla (bueno, algunos odiarla, pero eso gente es estúpida y no sabe de cine cutre y ‘exploitaition’).
Veréis, un virus zombi se ha cargado Escocia, los ingleses han pasado de ellos porque no les afectaba (y son escoceses y los odian) y que les den. Pero llega el día que empieza a afectarles y se dan cuenta que aún quedan escoceses vivos y mandan a una tía muy dura y molona (y a unos cuantos más, carne de cañón) para que vaya a encontrar la cura. Lo que pasa es que los escoceses les han cogido resquemor (¿Por qué será?) y se han convertido en una salvaje manada de punks caníbales (¿? Es bastante probable que usasen los excedentes de atrezzo y ropa de alguna de las últimas de “Mad Max”). Cuando logran escapar de los punks gracias a un Robin Hood que se encuentran, este los lleva a otra zona de Escocia, en la que en vez de mega punks, son caballeros medievales (¿?). Y ahí está Malcolm McDowell haciendo del bueno. ¡Que no! Que es el malo, malísimo. ¡Casi os engaño, eh! Y les explica la situación. Que no tiene cura. Así que todo acaba en persecuciones en coches de “Mad Max”, asesinatos, mezclas de punks y caballeros medievales corriendo por ahí y nuestra prota matando sin despeinarse. ¿Mola o no? ¡Pues claro que sí!
En su reparto encontramos a Malcolm McDowell y a Bob Hoskins (¿Qué hacían aquí? Especialmente el segundo, el primero es de los que se apunta a un bombardeo. Pues divertirse, fijo. Total, Bob después de “Super Mario” nunca fue el mismo ya). Y la prota molona, en plan Milla Jovovich, es Rhona Mitra, que está estupenda. Da hostias como panes y tiene una puntería que ríete tú de ella, como cualquier héroe de acción al uso, es imposible vencerla, no sonríe jamás, es más lista que el hambre y fría como el acero. Vaya, de las patea-culos que a mí me molan. Y también está en el reparto nuestro querido Alfred de “Gotham”, al actor Sean Pertwee. Lástima que tiene una de las muertes más crueles de la peli… pero le queremos.
En fin, jodidamente entretenida y adictiva. No puedes quitarle los ojos de encima y deseas ardientemente descubrir cómo va desembocando en más locura y más locura (cosa que hace). Es prácticamente impredecible, nunca sabes por donde te va a salir. Y ahora porque os lo estoy contando, pero si la ves sin saber nada de ella, como hice yo, flipas en colores. No tiene pretensiones, es bizarra como ella sola y es tan gamberra, que es de lo más divertido que he visto en meses. Y violenta, y gore, tiene de todo para que yo la adore.
Lo peor: ¿en serio? Pues que no tiene ni pies ni cabeza y copia descaradamente (y le importa una soberana mierda) miles de títulos. “Mad Max” es el más notorio, pero pasamos por títulos de películas a lo “Westworld” y sus mundos, “28 días después”, “Resident Evil”, “Rescate en Nueva York” y hasta por “Robin Hood”. Si es que, lo mezclas todo en la batidora, y te sale este título.
Y como ni tiene vergüenza ni la conoce, y bizarro es su segundo apellido, en realidad no tiene ninguna pega.
Conclusiones: os juro que cuando vi esta peli en el disco duro pensé que ya la había visto y que se me olvidó borrarla en su día. Pero al consultar en filmaffinity, no me sonaba haber visto una película de zombis con Bob Hoskins. Así que me la puse. Y efectivamente, no la había visto. ¿Cómo vivía yo tan feliz sin saber de su existencia? Es tan cafre, bruta, mix de mil pelis, e ida de olla en general, que solo puedo declararle mi amor eterno.
The Quest (En busca de la ciudad perdida)
The Quest
EEUU, 1996; Duración: 95 min., Director: Jean-Claude Van Damme, Guion: Steven Klein, Paul Mones (undefined: Frank Dux, Jean-Claude Van Damme), Música: David Gribble, Reparto: Jean-Claude Van Damme, James Remar, Roger Moore, Janet Gunn, Jack McGee, Aki Aleong, Ryan Cutrona, Abdel Qissi, Louis Mandylor, Koji Kitao, Peter Wong, Takis Triggelis, Chang Ching Peng Chaplin, Shane Meier, Matt Lyon, Jen Sung, Azdine Nouri, Stefanos Miltsakakis, Peter Malota, Winston Ellis.
Género: acción, aventuras, artes marciales.
Sinopsis: Chris Dubois es un delincuente callejero que, huyendo de la policía, acaba en una remota ciudad perdida del Tíbet, secuestrado y vendido como esclavo a unos piratas.
Lo mejor: es como Eurovisión, pero para machotes (no me vengáis ahora con remilgos, Eurovisión es muy gay). En vez de pirotecnia, vestiditos excéntricos y musiquita pop, aquí tenemos a los mejores luchadores del mundo que vienen para luchar entre ellos y ver quien es ganador (ya, se lo que pensáis, si participa Van Damme yo paso, gana fijo). Y que sepáis que España es más digna (aunque el luchador vaya un poco de torero) y quedamos en mejor posición que Eurovisión: a puntito de ganar. Pero el destino es muy perro y en la selección al azar de las finales nos toca contra Van Damme. Pero oye, dignísima pelea.
Además, mola un montón ver a todos los luchadores de cada país. Me encantó el sumo de Japón. Añadámosle secundarios de nivel como James Remar y Roger Moore y ya está todo dicho.
En definitiva, típica película de Van Damme, pero no mala por ello. Con muchas escenas de artes marciales muy bien hechas que harán las delicias de todo fan, y mucha diversión. Engancha todo el rato, se nota que JC dirige y escribe el guion, sabe lo que busca el fan que viene a ver estas películas.
Lo peor: pues eso, típica película de artes marciales de Van Damme, si te gustan, te gustará. Si no, es más de lo mismo. La expresividad de JC es la de siempre.
Conclusiones: tengo el disco duro con unas cuantas películas del bueno de JC que aún no he visto. Al igual que con todo el gore, las voy racionando para cuando necesito acción sin mucho cerebro. Y últimamente las necesito mucho.
Me lo he pasado muy bien viéndola y rescatándola del disco duro. Recomendada para todo fan de las artes marciales y del actor belga, por supuesto.
Fan de esta sección y ahora con gifs y todo,estas subiendo el nivel XDDDDD. La obsesión con Nick te jugara una mala pasada y volverás a cogerle tirria XDD (nah es broma). La de Van Damme hace años que no la veo, tengo que hacer un revisionado de sus películas que siempre son una alegría para el cuerpo XDDD
ResponderEliminarBueno, los gifs los empecé a añadir a partir de la entrada 15 (inclusive) de 'Limpiando el disco duro' :P pero sí, subí de nivel. Los gifs dan más caché siempre jaja
EliminarYa no, mi relación con Nicolas Cage es muy fuerte. No nos volverá a pasar XD Y menos después de enamorarme de "Besos de vampiro".
Y de Van Damme, yo estoy revisionándolas XD además de ver algunas que no había visto (es muy prolífico, tiene montones). Y si, siempre son una alegría para el cuerpo :P