lunes, 1 de junio de 2015

El hombre de acero








Titulo Original: Man of Steel (Superman) 
Año: 2013 
Duración: 143 minutos 
País: Estados Unidos 
Director: Zack Snyder 
Guión: David S. Goyer (Historia: David S. Goyer, Christopher Nolan) 
Música: Hans Zimmer, Junkie XL 
Reparto: Henry Cavill, Amy Adams, Russell Crowe, Michael Shannon, Kevin Costner, Laurence Fishburne, Diane Lane, Ayelet Zurer, Christopher Meloni, Richard Schiff, Antje Traue, Jadin Gould, Tahmoh Penikett, Michael Kelly, Dylan Sprayberry, Harry Lennix






Desde Krypton, un lejano planeta muy avanzado tecnológicamente, un bebé es enviado en una cápsula a través del espacio a la Tierra para que viva entre los humanos. Educado en una granja en Kansas en los valores de sus padres adoptivos, Martha (Diane Lane) y Jonathan Kent (Kevin Costner), el joven Clark Kent (Henry Cavill) comienza desde niño a desarrollar poderes sobrehumanos, y al llegar a la edad adulta llega a la conclusión de que esos poderes le exigen grandes responsabilidades, para proteger no sólo a los que quiere, sino también para representar una esperanza para el mundo.
En 2013, Zack Snyder llevó a la gran pantalla las aventuras del maromo del planeta Kriptón, unos años después de aquella película titulada Superman Returns, filme recibido con una fría acogida por parte de público y crítica. El tratamiento que Snyder le dio al superhéroe alienígena tiene muchos puntos en común con todas estas pelis en que se cuentan los orígenes del personaje (Batman Begins, Iron Man, Robocop, etc)… De hecho, no es casualidad que el guión corra a cargo de Christopher Nolan y David S. Goyer, los verdaderos artífices de este reinicio. La historia de Kal-el, Superman, es conocida por todos y poco hay que decir al respecto, lo interesante de todo ello es que por primera vez tenemos una excelente visión de lo que es su planeta natal (Kriptón) y los conflictos que sufren sus habitantes por el control de aquel lugar. En este punto aparece Russel Crowe haciendo de Jor-El, padre de Superman y como es habitual, lo borda como científico con la tremenda responsabilidad de enviar a su hijo a un planeta desconocido para escapar de la muerte y un ejército de hijoputas encabezados por el General Zod (Michael Shannon).

Total, que Kal-el (Henry Cavill) va a parar a la Tierra y es criado por la familia Kent, Jonathan y
Marta (Kevin Costner y Diane Lane): ya desde que es una larva empieza a destacar como niño rarito y como que no encaja entre los humanos. Sin embargo, según pasa el tiempo y se hace mayor, se da cuenta de la importancia de su papel en la sociedad humana, aunque trata de pasar desapercibido la mayor parte de las veces. El guión nos explica muy bien el viaje interno de Clark Kent y su relación con Louise Lane (Amy Adams), todo ello muy Batman Begins donde hay un camino que tiene que recorrer el héroe para encontrarse a sí mismo y calzarse el traje de luces. Por cierto, menos mal que a alguien se le ocurrió quitarle a Superman los gayumbos por encima del pantalón (ya era hora), porque aunque tiene la ventaja de que marcas paquetón, para andar y para ir al váter es lo peor que existe. Si digo esto es porque hablo desde la experiencia, obviamente (una infancia sin ponerse los calzones por encima del pantalón no es infancia, es una putada). Ahora lo que tenemos entre manos es una especie de body glove, al estilo de unas mallas pero de color oscuro y sin estridencias… Me gustó el diseño nuevo, hay que reconocer que se lo han currado.

Luego tenemos el tema de la invasión alienígena, muy bien tratada y de forma seria. Tenemos a los chafanidos kriptonianos comandados por Zod y Faora (Antje Traue) que amenazan con destruir la Tierra si no les entregan a Superman para recuperar el código genético de su raza y tal, lo que pasa es que lo quieren utilizar para terraformar la Tierra a semejanza de Kriptón y hacer picadillo con los humanos. El diseño de estos invasores también me pareció genial, con unas armaduras muy chulas, unas naves espaciales espectaculares y unos personajes bastante hijoputescos que derrochan inteligencia, fuerza y mala baba. Muy distinta, desde luego, que aquella invasión alien de Los Vengadores, que parecía el tráiler de un videojuego de la Plaisteichon II con unas naves espaciales calcadas de Transformers 3 y unos extraterrestres que parecían una mezcla entre Piccolo y Mario Vaquerizo. Bitch, please. Espero que en La Era de Ultrón se esfuercen por hacer unos villanos a la altura, porque Loki sí funcionaba, pero los monstruitos que venían del espacio eran una risa.

El guión avanza y tenemos romance entre Clark y Louis Lane, se conocen poco a poco, se gustan, el maromo la salva de vez en cuando y bueno, cuando la cosa hace pop ya no hay stop. Por lo menos el tema no es tan moñas como en las películas antiguas de Christopher Reeves, donde Louise Lane estaba siempre haciendo vuelos sin motor para que viniera el tronista de Kriptón a rescatarla… Sí, esas pelis han envejecido mal, pero estamos hablando de la primera saga cinematográfica de superhéroes como tal y de eso ya han pasado muchos, muchos años. Luego está el rollo de Lex Luthor, que termina siendo un duermeculos de cuidado y como enemigo se repite demasiado, cosa que puede acabar con el interés de una saga.


En definitiva, una peli muy recomendable y tal vez algo infravalorada, por sus similitudes con Batman Begins y demás. Luego tiene el problema de exceso de metraje: a Christopher Nolan y a Zack Snyder nunca les basta con dos putas horas. Sí, las aprovechan bien y todo eso, pero es que les da igual. Si contasen la historia de un zurullo volador con patas que lee a Dostoyevski y tiene adicción al chocolate, también tendrían que irse hasta las dos horas de metraje… El tema para ellos es lo de menos, si no son 120 minutos mínimo, se nos enfadan y no ruedan la peli.


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