Vengo con la segunda tanda de cintas que aproveché para ver en la Fiesta del Cine, y ene sta ocasión la cosa viene movidita, y con géneros bastante diferentes. Por un lado tenemos 'El Hijo', cinta bastante interesante de principio, y luego tenemos 'John Wick: capítulo 3 - Parabellum', que tenía unas ganas locas de verla.
¿Habeis visto alguna de las dos?
El Hijo
(Brightburn)
EEUU,
2019; Duración: 90 minutos; Director: David Yarovesky; Guion:
Brian Gunn, Mark Gunn; Música: Tim Williams; Reparto: Jackson A. Dunn, Elizabeth Banks, David Denman, Meredith Hagner, Matt Jones, Jennifer Holland, Steve Agee, Becky Wahlstrom, Stephen Blackehart, Terence Rosemore, Annie Humphrey, Christian Finlayson, Emmie Hunter, Mike Dunston, Gregory Alan Williams, Elizabeth Becka, Gwen Parrish, Leah Goodkind, Shaun McMillan, Michael Rooker
Género: ciencia ficción, terror
Sinopsis: ¿Qué pasaría si un niño de otro mundo
aterrizara de emergencia en la Tierra, pero en lugar de convertirse en un héroe
para la humanidad fuera algo mucho más siniestro?
Lo mejor: la premisa de la que parte es muy
interesante, a la par que llamativa y atractiva, y es que es una vuelta de
tuerca al mundo de los superhéroes y a la visión que tenemos sobre ellos, ya sabéis
que son los salvadores de la humanidad y demás. En esta ocasión sigue la misma línea
de concepción que éstas, pero siendo muy diferente, porque en este caso te plantea
la situación de que el supuesto héroe, en este caso alien, es un ser endiablado
que disfruta haciendo sufrir a los demás, y de que manera. Tiene su toque de terror,
si, pero es más psicológico que otra cosa, tirando más bien por el thriller que
por el terror como tal (podemos decir que es un thriller de terror, o algo así).
Y tiene sus toques gores, por supuesto, que tampoco es que sean muchos, pero los
pocos que tiene son bastante explícitos, y muy logrados, por cierto, lo que le
da más dinamismo a la cinta. Tiene un montón de referencias a ‘Superman’ y a
todo su mundo, que no voy a decir por aquí porque lo realmente divertido es ir captándolas
todas y comparando, además. Tiene un tufillo de película de serie B que es una
pasada, sobre todo para alguien como yo que adora esas cintas. Quiero destacar además
su reparto: Elizabeth Banks está más que correcta en su papel de madre coraje,
pero quiero mencionar al chico protagonista, Jackson A. Dunn, que sabe construir
un personaje muy interesante y perturbador, que tan pronto sientes empatía por él
como que te da un escalofrío solo con ver su mirada.
Lo peor: a ver, no es perfecta, y en ocasiones es
un poco obvia, pero no es algo que moleste demasiado, al menos no a mí.
Conclusión: da gusto cuando, de vez en cuando, te
sorprenden con las cintas, y, sobre todo, buscan el sorprender al espectador
por otros medios, y aunque no les salga perfecto a veces, eso no quita que sea
un buen entretenimiento ‘El Hijo’ lo es, y aunque sea pequeña y pase un poco
desapercibida, es digna de recomendar.
John Wick: capítulo 3 – Parabellum
(John Wick: Chapter 3 – Parabellum)
EEUU, 2019; Duración: 130 minutos; Director:
Chad Stahelski; Guion: Derek Kolstad, Shay Hatten, Chris Collins, Marc
Abrams; Música: Tyler Bates, Joel J. Richard; Reparto: Keanu Reeves, Halle Berry, Ian McShane, Anjelica Huston, Laurence Fishburne, Lance Reddick, Asia Kate Dillon, Jason Mantzoukas, Mark Dacascos, Yayan Ruhian, Cecep Arif Rahman, Robin Taylor, Tobias Segal, Saïd Taghmaoui, Jerome Flynn, Randall Duk Kim, Margaret Daly, Susan Blommaert
Género: acción, thriller
Sinopsis: John Wick (Keanu Reeves) regresa a la
acción, solo que esta vez con una recompensa de 14 millones de dólares sobre su
cabeza y con un ejército de mercenarios intentando darle caza. Tras asesinar a
uno de los miembros del gremio de asesinos al que pertenecía, Wick es expulsado
de la organización, pasando a convertirse en el centro de atención de multitud
de asesinos a sueldo que esperan detrás de cada esquina para tratar de
deshacerse de él.
Lo mejor: es curioso el bagaje de esta saga, y es
que llego sin hacer ruido apenas, y con esta tercera entrega, el hype ha sido
brutal, y no es de extrañar, ya que ha causado sensación, y con razón. Para este
nuevo capítulo, todo lo que habíamos visto antes se multiplica por tres, nunca
mejor dicho, y es que parecía complicado que mejorasen la segunda (que me pareció
brutal), pero lo han conseguido, y encima de calle. La historia continua donde
lo dejamos en la anterior, y vuelve a ser muy entretenida e interesante, porque
una de las cosas buenas de estas cintas es que no solo se basan en escenas de acción
sin sentido, como otras del mismo género, sino que tiene su trasfondo detrás, y
además bien construido e hilado; hay un equilibrio entre ambas partes, y funciona
muy bien gracias a un guion bastante solido (como os digo, esto no siempre pasa,
y a veces nos tragamos cintas bastante mierders en cuanto a guion se refiere). Las
escenas de acción son una brutalidad, todas y cada una de ellas, coreografiadas
con un detalle y un cuidado absoluto, además de ser de lo mejor que he visto en
el cine en mucho tiempo. Se nota el cariño y el esfuerzo que le han puesto, y
yo que se lo agradezco, porque es que tiene de todo, de verdad (incluso una persecución
a caballo). Para esta ocasión, el reparto crece, y se añaden nombres la mar de
interesantes y que le hacen la replica perfectamente a nuestro protagonista,
sin olvidar a los grandes nombres que ya teníamos en ella. Y luego tenemos a
Keanu Reeves, que es el perfecto John Wick y que sin duda se ha ganado el corazón
de todos los amantes del género, porque nos ha regalado un héroe (o antihéroe
mas bien) que todos quisiéramos tener cerca en algún momento. Es brutal.
Lo peor: absolutamente nada.
Conclusión: creedme cuando os digo esto, pero esta
saga va a dejar su huella en la historia del cine de acción (bueno, en realidad
ya lo ha hecho), y es que se lo ha ganado por méritos propios, trayéndonos algo
novedoso en un género que está ya muy trillado. Uno de mis héroes de acción favorito
tiene nombre propio: John Wick.
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