miércoles, 26 de junio de 2019

Breves reseñas de junio


Vamos llegando al final del mes de junio, y como no puede ser de otra manera llegamos con una tanda de breves reseñas para amenizaros un poco el día y este calor horrible que ya nos acecha.
¿Las habéis visto todas? ¿Que os parecieron?





  • Vamos a empezar primero con las que nos ha preparado Vero:

Hana-Bi: Flores de fuego
(Hana-bi) 


Japón, 1997; Duración: 103 min., Director: Takeshi Kitano, Guion: Takeshi Kitano, Música: Joe Hisaishi, Reparto: Takeshi Kitano, Kayoko Kishimoto, Tetsu Watanabe, Ren Osugi, Susumu Terajima, Yasuei Yakushiji, Tarô Itsumi, Makoto Ashikawa, Yuko Daike.
Premios:
1997: Festival de Venecia: León de Oro - Mejor película.
1997: Premios Cesar: Nominada a Mejor película extranjera.
1998: Premios Independent Spirit: Nominada a Mejor película extranjera.
1998: Asociación de Críticos de Chicago: Nominada a Mejor película extranjera. Género: drama, crimen, policíaco.

Sinopsis: Un policía llamado Nishi (Takeshi Kitano) se enfrenta a la enfermedad terminal de su esposa, al drama de un compañero que ha quedado parapléjico en una redada y a un grupo de mafiosos que le siguen la pista.


Lo mejor:
una de las obras cumbres de Kitano y un compendio de todas sus características fílmicas: su lirismo (aquí más notable que nunca, con multitud de escenas fijas que graban el vacío, rostros casi congelados o piezas casi poéticas), su violencia, los toques autobiográficos y los taciturnos personajes a los que él da vida: violentos, duros y melancólicos, pero siempre con su corazoncito.
La sinopsis base es la de un hombre que lo ha perdido casi todo (hija pequeña muerta, mujer enferma terminal, un compañero en silla de ruedas por el que se siente culpable y yakuzas que le atosigan por no doblegarse a la corrupción) y al que acompañaremos hasta su fin. No esperéis un argumento lineal, ni mucho menos. Todo es como un puzle que irá encajando poco a poco y en el que el espectador tiene que adaptarse a los saltos temporales y a interpretar las escenas que se ven. Es por ello que la cinta necesita de un espectador activo, no uno que no piense y se deje llevar.
Sí que es cierto que guarda parecido con sus anteriores películas, manteniendo las intrigas policiales con los toques de ‘buddy movie’, pero aquí además le gusta dejarse llevar por la estética y el toque poético (una parte de la película es narrada mediante las pinturas que el amigo de Nishi hace), que afectan a un montaje que no es cronológico.
Es una cinta muy compleja, y artística. Provoca muchas sensaciones mientras la ves, pero es difícil escribirlas (para mí al menos, no soy estudiosa del cine ni critica profesional). Pero a mi desde luego me llegó y creo que es lo importante, aunque esté un pozo pez para transmitirlas.
Por cierto, las pinturas que podemos ver en la cinta son pintadas por el propio Takeshi (no hay nada que no sepa hacer este hombre).

Lo peor: no será comprendida por muchos y es que no es fácil adentrarte en ella.
Recomendable tener bagaje con el cine de Kitano y, en general, con el cine japonés.

Conclusiones: una de las obras más celebres (entre crítica y público) de las películas de Takeshi. También una de las más personales del director y que a mí me ha cautivado. Es una cinta bastante diferente a lo que suelo ver, incluso dentro del cine de Kitano, pero que me ha encantado y absorbido por completo. Cuando una cinta te afecta y te deja meditando en ella varios días es que ha dado en el blanco. Es complicada, y no las más idónea para comenzar con su cine, pero ahí está para quien quiera adentrarse.
¿Sabéis? Siempre he dicho que a mí el cine japonés no me gusta. Pero estaba bastante equivocada y lo decía fundamentándome en ciertas cintas que había visto. Y conforme más veo, más lo comprendo y me gusta (de todo hay, como en todos lados). Bien es cierto que aún sigo con la filmografía de Takeshi que me faltaba (actuando, dirigiendo o ambas cosas), pero pienso expandir más mis horizontes cuando la termine a los clásicos. Ya os contaré.


Deadwood. La película
(Deadwood: The Movie) 


EEUU, 2019; Duración: 110 min., Director: Daniel Minahan, Guion: David Milch (Personajes: David Milch), Música: Reinhold Heil, Johnny Klimek, Reparto: Timothy Olyphant, Brad Dourif, Ian McShane, Molly Parker, Sean Bridgers, Paula Malcomson, Anna Gunn, Kim Dickens, Gerald McRaney, Robin Weigert, John Hawkes, Jeffrey Jones, W. Earl Brown, William Sanderson, Jade Pettyjohn, Dayton Callie, Keone Young, Jerry Cantrell, April Audia, Noelle E Parker, Ego Mikitas, Hal Dion, Tony Curran, Geri Jewell, Franklyn Ajaye, Caleb Thomas.
Género: western, secuela.

Sinopsis: Ubicada argumentalmente 10 años después del final de la tercera temporada de la serie "Deadwood", que finalizó su emisión en 2006, las rivalidades pasadas se reinician, las alianzas se ponen a prueba y las viejas heridas se reabren, ya que todos se quedan para navegar por los cambios inevitables que la modernidad y el tiempo han provocado.


Lo mejor: 13 años han tenido que esperar los fans que la vieron en su día (yo soy fan, pero la empecé a ver hace un par de años) para darle un final digno (y no aquel tan abierto) y por fin ha llegado. Y sí, ha merecido la pena la espera. Y sí, hay que verla.
Diez años han pasado en la ficción y todos los protagonistas se reúnen de nuevo, conocemos que ha sido de ellos y también lo que el futuro les depara.
Ver reunido al reparto, reencontrarte con ellos y con el pueblo es toda una gozada. Todo está igual que la última vez que lo vimos y la historia retoma donde la dejó gracias a la vuelta de uno de los personajes. El guion es ágil y es muy fácil volver a la dinámica aunque hayan pasado ya años desde que la serie finalizase
La factura técnica sigue siendo impresionante y los actores son perfectos en sus roles. Un gusto poder verlos a todos de nuevo.
Una despedida preciosa y emotiva. Ese dialogo final se me va a quedar para siempre.
Muy contenta con como ha quedado.
Ains, Ian McShane, siempre serás mi favorito (aunque me gustáis todos, eh: Timothy, Brad y compañía).

Lo peor: ni será la mejor película (es más bien un capítulo largo, pero “Deadwood” siempre tuvo factura de película) ni el mejor capítulo de la serie, pero tiene algo especial que todo fan reconocerá, así que no le veo peros.

Conclusiones: de obligado visionado para todo seguidor de la serie. Yo disfruté mucho viéndola (que me pirran los westerns no es nada nuevo) y siempre he sentido que el final fuese tan abierto, que merecía más. Y por fin ha recibido lo que una gran serie como esta merecía. Muy contenta.


Dead Rising. Watchtower 


EEUU, 2015; Duración: 118 min., Director: Zach Lipovsky, Guion: Tim Carter, Música: - , Reparto: Jesse Metcalfe, Rob Riggle, Meghan Ory, Virginia Madsen, Keegan Connor Tracy, Dennis Haysbert, Julia Benson, Patrick Sabongui, Aleks Paunovic, Reese Alexander, Carrie Genzel, Sachin Sahel.
Género: thriller, drama.

Sinopsis: La historia nos traslada a un mundo infectado por zombis y como un grupo de personas tratará de hacer frente a la infección buscando el origen del brote. Sin embargo, todo hace indicar que una conspiración del gobierno está detrás de todo. Adaptación al cine de la serie de videojuegos de Capcom.


Lo mejor: pues que es entretenidísima. Que sí, que no ofrece nada que no hayamos visto ya, pero como es una idea tan sencilla y se desarrolla de forma ágil y rápida pues te hace pasártelo bien si eres fan de los zombis (muchos puntos extra si además lo eres del videojuego).
Está bien rodada, los muertos que deambulan están muy bien caracterizados y hay escenas realmente chulas (¡el payaso zombi!), los actores cumplen y la cinta tiene buen ritmo.
Tiene muchos guiños al videojuego, desde tomas en primera persona a uso de armamento igualito al juego (te tenías que montar el arma como bien pudieses, igualito que pasa aquí).
Una cinta llena de acción, con toneladas de zombis, puntito de locura (esos motoristas pirados…) y mucha supervivencia. Y la verdad es que engancha. Vaya, lo que pretendía ser “The Walking Dead” y casi nunca fue.

Lo peor: típica, no esperéis nada nuevo en ella. Más de lo mismo y con un guion muy justito (pero que queréis, el videojuego era muy básico también).
Quizás el único pero que le podría es su duración, media horita menos la habría hecho mucho más ligera, que es algo que estas cintas necesitan. ¡Que tampoco hay que explicar mucha trama!

Conclusiones: no le tenía yo mucha fe, las adaptaciones de videojuegos ya sabemos cómo suelen ser. Y luego tenemos a las películas de zombis de cada diez, cinco como mínimo son bodrios mayúsculos e intragables (y mirad que soy fan). Pero oye, que esta tiene su aquel e hizo que me lo pasase bastante bien.
Para fans de los zombis, resultará un producto entretenido. Y si te gusta el videojuego, dale también una oportunidad.
Por cierto, tiene 2ª parte, así que a ver si me pongo y es al menos tan entretenida como esta (que yo no pido mucho).


The Prodigy 


EEUU, 2019; Duración: 92 min., Director: Nicholas McCarthy, Guion: Jeff Buhler, Música: Joseph Bishara, Reparto: Taylor Schilling, Brittany Allen, Jackson Robert Scott, Colm Feore, Peter Mooney, Olunike Adeliyi, David Kohlsmith, Mark Sparks, Michael Dyson, Ava Augustin, Ashley Black, Byron Abalos.
Género: terror, thriller, sobrenatural.

Sinopsis: Una madre preocupada por el comportamiento perturbador de su hijo, está convencida de que algo sobrenatural está transformando la vida del pequeño y de quienes lo rodean, poniéndolos en peligro.


Lo mejor: su uso del terror, a través de la angustia de la madre (y de algún que otro sustito por volumen) está bastante conseguido. Logra meterte en la historia, resultando en todo momento inquietante. Algunas escenas, con el niño mirando fijamente o esos breves momentos en los que parece otra persona, son suficientes para generar el mal rollo necesario para este tipo de producciones.
Realmente, a pesar de lo predecible que puede ser, es modélica en sus formas. Está bien realizada, es entretenida y los actores están muy creíbles. Mención especial para el pequeño Jackson Robert Scott, joder con el jodío, que bien lo hace.

Lo peor: una más de niño psicópata (en este caso, con el alma de un asesino en serie dentro) que atemoriza a sus pobres padres y a todo ser viviente con el que se tope.
No es que tenga nada malo, simplemente es tremendamente predecible y lineal (no esperéis ni un giro de guion ni nada memorable).

Conclusiones: pues una más de tantas, no tiene nada especial, pero tampoco resulta desagradable o aburrida. Se ve y pasas un rato entretenido. Lo bien que lo hace el crío (esta cinta puede quitar las ganas de tener descendencia, incluso para todos aquellos que lo desean con fuerza) y que la película tiene una buena factura técnica hacen el resto.
Para fans de niños psicópatas.


Bienvenidos a Marwen
(Welcome to Marwen)

EEUU, 2018; Duración: 116 min., Director: Robert Zemeckis, Guion: Caroline Thompson, Robert Zemeckis, Música: Alan Silvestri, Reparto: Steve Carell, Leslie Mann, Janelle Monáe, Diane Kruger, Eiza González, Gwendoline Christie, Merritt Wever, Neil Jackson, Siobhan Williams, Matt O'Leary, Falk Hentschel, Nikolai Witschl, Patrick Roccas, Leslie Zemeckis, Stefanie von Pfetten, Eric Keenleyside, Robert Mann, Clay St. Thomas, Kate Gajdosik, Conrad Coates, Veena Sood, Brad Kelly, Patrick Sabongui, Fraser Aitcheson, Jeff Sanca, Adrian Persad, Sharon Crandall, Gerald Paetz, Jason Glass, Matt Ellis.
Género: drama, fantástico.

Sinopsis: Film inspirado en el documental "Marwencol" (2010), que narraba la historia real de Mark Hogancamp, un hombre que tras sufrir un terrible asalto estuvo en coma nueve días, tras el cual se despertó con una amnesia completa. Su única terapia fue construir en su jardín unas maquetas con figuras de soldados de II Guerra Mundial...


Lo mejor: el cine de Zemeckis me gusta mucho y aquí está en su elemento. Una historia bonita, imaginativa, tierna, con un punto de locura y que resulta original. Me ha gustado mucho la forma de contarla, como poco a poco, a través de los muñecos de Mark, vamos conociendo lo que le sucedió en la vida real e identificando a los homólogos de cada uno y la relevancia que tuvieron, o siguen teniendo, en algún momento de su vida.
Además, las animaciones son chulas y el nivel de detalle que tienen son una pasada (¡esas casitas y la recreación del propio Marwen! Son fantásticas).
Steve Carell está estupendo. Es curioso este hombre, puede verlo en una comedia o en un drama, y nunca parece fuera de su elemento. Y además, tiene ese puntito adorable tan necesario para esta cinta. Realiza un bonito retrato de su protagonista, al que le coges cariño. Y tampoco hay que olvidarse de las mujeres de la cinta, divertidas y guerreras todas ellas.
La cinta es entretenida en todo su metraje, se intercala muy bien las secuencias animadas y las que tienen actores y nunca se hace pesada. Tiene un toque tierno muy bonito (que tampoco encuentro tan ñoño como dicen), que te hace implicarte enseguida con su protagonista. Y además, no nos podemos olvidar de los momentos ‘gamberretes’ típicos del director, apreciables en varias de las escenas con los muñecos (los diálogos, o la sangre y la violencia de las batallas).
Es una cinta rara, sí. Que mezcla muchas cosas. Pero que al final, es el retrato de un hombre que sufrió un trauma y se siente solo y asustado. Y la forma que encuentra para sobrellevar ese trauma es revivirlo con sus muñecos, pero modificándolo y adaptándolo para que acabe diferente a como fue en realidad.

Lo peor: la vi tan a gusto que no sabría deciros…

Conclusiones: me quedé con las ganas de ir al cine a verla, pero no se estrenó en ninguno de por aquí, tristemente. Vista ahora en casa, me sabe fatal, porque me lo he pasado muy bien y en el cine me hubiese gustado más aún (ahí se disfruta mucho más cualquier película, eso es así). Creo recordar que tampoco hablaron muy bien de ella, que si era rara, que si muy ñoña… en fin, no lo comparto, a mí la verdad es que sí que me ha cautivado.
Os recomiendo darle una oportunidad, su puntito de humor, su ternura y un estupendo Steve Carell lo merecen.

  • Y ahora os dejo con las mias:

Una vida a lo grande

(Downsizing)


EEUU, 2017; Duración: 135 minutos; Director: Alexander Payne; Guion: Alexander Payne, Jim Taylor; Música: Rolfe Kent; Reparto: Matt Damon, Christoph Waltz, Hong Chau, Kristen Wiig, Jason Sudeikis, Udo Kier, Neil Patrick Harris, Laura Dern, Margo Martindale, Kerri Kenney, Maribeth Monroe, Niecy Nash, Donna Lynne Champlin, Joaquim de Almeida, Rolf Lassgård, Ingjerd Egeberg, Søren Pilmark, Jayne Houdyshell, James Van Der Beek, Patrick Gallagher, Kevin Kunkel, Kristen Thomson, Brendan Beiser, Don Lake, Mary Kay Place, Juan Carlos Velis, Veena Sood, Jeff Clarke, Pepe Serna
Género: ciencia ficción, comedia, drama

Sinopsis: Paul es un hombre que se da cuenta de que tendría una vida mucho mejor si encogiese, pues todo lo que necesita en la vida lo tendría igualmente, pero en abundancia. Así que decide reducir enormemente su tamaño, ahora que la tecnología lo permite.


Lo mejor: el tema que trata es muy necesario y actual, todo sea dicho, y es que los humanos, en nuestro empeño de ser guays, nos estamos cargando el planeta, y no poco a poco, sino de manera bestial y a saco, y en la cinta lo pone de manifiesto reiteradas veces, sobre todo en su segunda mitad. Todo lo que tiene que ver con la reducción de personas y su proceso es cuanto menos interesante, por no hablar de un reparto muy interesante, sobre todo la parte que le toca a Matt Damon (al que adoro desde que tengo memoria) y a Christoph Waltz (este hombre es puro talento). Puede parecer una utopía en si misma, pero no le falta razón en muchas de las premisas que trata: el cambio climático, la falta de suministros, la economía…en fin, todo lo ‘bueno’ que tenemos en nuestro mundo actual.

Lo peor: creo que da demasiados rodeos para contar las cosas, se centra en historias que no tienen mucho que ver con la trama principal, y que no la complementan en lo absoluto, por tanto, son totalmente innecesarias y sirven solo para rellenar y hacerla demasiado larga (con una hora y media de metraje hubiese explicado lo mismo). Se hace un poco pesada a veces, porque su puesta en escena no es muy ágil y el desarrollo es un tanto desigual.

Conclusión: es una película interesante en su mayor parte, denunciando temas ecológicos que están ahora en pleno auge y haciéndonos pensar en lo destructivo que es el ser humano. No es una maravilla de cinta, pero tampoco es algo que no merezca la pena ver.



La perfección

(The Perfecttion)


EEUU, 2018; Duración: 90 minutos; Director: Richard Shepard; Guion: Eric C. Charmelo, Richard Shepard, Nicole Snyder; Música: Paul Haslinger; Reparto: Allison Williams, Logan Browning, Alaina Huffman, Steven Weber, Glynis Davies, Winnie Hung, Stephen Chang, Graeme Duffy, Mark Kandborg, Doralynn Mui, Evelyn Chew, Sharon Crandall, Alex Lee
Género: terror

Sinopsis: Una chica prodigio obsesionada con alcanzar la perfección tocando el violonchelo comienza a sufrir una serie de cambios siniestros en su vida.


Lo mejor: admito que es un tanto perturbadora, sobre todo porque cuenta con algunos giros de guion bastante interesantes y que incluso pueden llegar a sorprenderte, cosa que se agradece. Las actuaciones son sin duda uno de los puntos fuertes de la película, sobre todo las dos chicas protagonistas, que no necesitan de demasiadas palabras para transmitirnos lo que quieren decir o lo que están sintiendo en ciertos momentos. Un thriller psicológico en toda regla (olvidaros del terror, porque no lo es para nada), y como tal funciona a la perfección: puede parecer ridícula en ciertas partes, pero eso lo único que hace es darle mas vida a la cosa, al menos a mi me lo parece. Tiene gore, además, lo justo y necesario, sin excederse para contentar al espectador, pero en su justa medida para hacernos poner cara de asco.

Lo peor: es un poco cliché a veces, por no decir obvia en su planteamiento, y si ya estás un poco versado en este tipo de cintas, veras lo que va a pasar a la legua, y eso le quita sorpresa al asunto. Se ve que es un poco serie B en ocasiones, pero no en plan bien, sino en plan cutre, al menos un poco.

Conclusión: intenta parecerse a sus hermanas mayores, en este caso cintas de la talla de ‘Déjeme salir’ o la más reciente, ‘Nosotros’, siendo similar en su puesta en escena, pero se nota las carencias con las que cuenta y que, bueno, la mente privilegiada de Jordan Peele no está aquí. Aun así, es una cinta muy interesante de ver.



La caza

(Jagten – The Hunt)


Dinamarca, 2012; Duración: 111 minutos; Director: Thomas Vinterberg; Guion: Thomas Vinterberg, Tobias Lindholm; Música: Nikolaj Egelund; Reparto: Mads Mikkelsen, Thomas Bo Larsen, Annika Wedderkopp, Alexandra Rapaport, Anne Louise Hassing, Lars Ranthe, Lasse Fogelstrøm, Susse Wold, Ole Dupont, Sebastian Bull Sarning
Género: drama

Sinopsis: Tras un divorcio difícil, Lucas, un hombre de cuarenta años, ha encontrado una nueva novia, un nuevo trabajo y trata de reconstruir su relación con Marcus, su hijo adolescente. Pero algo empieza a ir mal: un detalle cualquiera, un comentario inocente y una mentira insignificante que se extiende como un virus invisible sembrando el estupor y la desconfianza en una pequeña población...


Lo mejor: todo en ella es brutal. La historia que trata es, cuanto menos, dura, y la plasma sin pelos ni señales, con detalles en los momentos en los que es necesario, e insinuando en aquellos que lo necesita. Te hace pensar, y mucho, en todo lo que se dice y, sobre todo, quien lo dice. Muchos opinan eso de ‘los niños no mienten’, pero ya os digo yo que sí, y mucho, aunque a veces no lo han de manera consciente. Trata también el hecho de como las personas nos fiamos de todo lo que dicen los demás sin pruebas, sin pararnos a pensar en si puede ser cierto o no, o en las consecuencias que puede tener eso en la vida de los demás. Y, como no puede ser de otra manera, en el cambio que pueden sufrir éstos y en lo complicado que puede resultarles todo después (ya sea cierto o no lo que cuenten sobre ellos). Puede parecer que busca el drama barato, la lágrima fácil, pero no es así: simplemente busca removerte por dentro, con una historia dura y cruel, y haciéndote sentir una impotencia bestial. Y luego queda hablar de Mads Mikkelsen, en un papel muy complicado, pero con el que se hace desde el comienzo, con una interpretación magistral (la escena de la iglesia es prueba de ello), que muestra la rabia contenida de una persona que se sabe inocente. Impresiona y mucho.

Lo peor: nada.

Conclusión: estas son las cintas de las que me arrepiento no haber visto antes, mas que nada porque me estoy perdiendo pequeñas joyas que se necesitan ver con urgencia, sobre todo si eres amante del cine. Os la recomiendo muchísimo.


Peleando en familia

(Fighting with my family)


Reino Unido, 2019; Duración: 108 minutos; Director: Stephen Merchant; Guion: Stephen Merchant; Música: Vik Sharma; Reparto: Florence Pugh, Vince Vaughn, Dwayne Johnson, Lena Headey, Nick Frost, Jack Lowden
Género: comedia, drama

Sinopsis: Un antiguo luchador de lucha libre y su familia se ganan la vida actuando a lo largo del país, pero sus hijos sueñan con poder vivir del Wrestling.


Lo mejor: esta muy bien estructurada, muy correcta, hablándonos de la vida de Paige y de todo lo que tuvo que hacer para llegar a cumplir su sueño: llegar a estar en WWE y ser campeona. Pero no se centra solo en eso, si no que la verdadera historia es la relación con su familia, en su apoyo, en hacernos ver como la familia es lo mas importante que tenemos, los que nos hacen ver hasta donde podemos llegar y que son los que se alegran de nuestros éxitos y nos ayudan a levantarnos de nuestros fracasos. No son perfectos, y siempre hay roces, pero no dejan de ser lo mas valioso que tenemos, y en la cinta es lo que prima por encima de todo. Es bastante divertida, y eso esta bien, porque tomarse demasiado en serio a ella mismo hubiese sido un error demasiado grave, más que nada por el tono en general. Todo en ella es irónico, pero con un toque de adorabilidad (¿existe esta palabra?) que hace que te encariñes con los protagonistas desde el principio, de todos y cada uno de ellos. El cameo de Dwayne Johnson siendo ‘The Rock’ por un momento, es genial.

Lo peor: me hubiese gustado que se mostrasen muchas mas escenas de lucha, algún combate entero, que se yo, más acción por esa parte, pero creo que esto ya es a título personal, que quería yo ver darse caña a la gente. Además, si no eres dan del wrestling, puede que llegue a resultarte aburrida.

Conclusión: si eres fan de la lucha libre como yo, puede resultar muy interesante su visionado para conocer la historia de la mujer que consideran la verdadera revolucionaria de la lucha femenina en WWE, pero es que, si no eres fan de ella, creo que también puede resultar interesante.


Extremadamente cruel, malvado y perverso

(Extremely Wicked, Shockingly Evil and Vile)


EEUU, 2019; Duración: 108 minutos; Director: Joe Berlinger; Guion: Michael Werwie; Música: Marco Beltrami, Dennis Smith; Reparto: Zac Efron, Lily Collins, John Malkovich, Angela Sarafyan, Kaya Scodelario, Jeffrey Donovan, James Hetfield, Grace Victoria Cox, Kevin McClatchy, Carly Tamborski, William Cross, Jim Parsons, Haley Joel Osment, Terry Kinney, Dylan Baker, Sydney Vollmer, Morgan Pyle, Ken Strunk, Ryan Wesley Gilreath, Joe Berlinger, Brandon Trost, Tim Young, Chris Petty, Brian Geraghty, Michael Simkin, Caroline Hurwitz, James Harper, Grace Balbo, Ming Wang
Género: thriller, drama

Sinopsis: Ted Bundy fue uno de los asesinos en serie más peligroso de los años 70 pero, además de asesino fue un secuestrador, violador, ladrón, necrófilo... Su novia, Elizabeth Kloepfer, se convirtió en una de sus más fieles defensoras, negándose a creer la verdad sobre él durante años. La historia de sus numerosos y terribles crímenes contada a través de los ojos de Elizabeth.


Lo mejor: me ha sorprendido, muy gratamente, Zac Efron, y es que, aunque el tío ha sabido desligarse un poco de su pasado juvenil, siempre estará ahí, y ya sabemos que los prejuicios son difíciles de quitárselos uno de encima. Efron demuestra su talento de sobra, con una actuación contenida, haciéndose con el personaje desde el comienzo, y valiéndose solo de miradas y gestos para comunicarse con el espectador. La cinta crea un aura especial sobre el personaje, mostrándole en todo momento como el monstruo que realmente era, pero sin dejar de humanizarle nunca, algo que resulta curioso. Esta estructurada de una manera muy correcta, siendo entretenida y ágil a un tiempo, sin caer en el aburrimiento, y llegando a crear un equilibrio muy correcto con las partes de la vida del personaje y el juicio en el que se dio a conocer de verdad: no vamos a negar que el tío era carismático a mas no poder, sino de que todos esos seguidores que tenía (mujeres, encima serán mujeres… ¡de locos!). Hay que destacar también la interpretación de Lily Collins.

Lo peor: me ha faltado algo en ella, quizás ahondar un poco mas en la mente de Ted Bundy y no centrarse tanto en la historia de ‘amor’ entre los protagonistas. Se que está basada en las memorias de ella, y que es lógico que tire mas por la chica, pero no sé, le ha faltado profundidad en la persona del asesino, que es lo importante aquí, seamos sinceros. Deja muchas cosas en el aire con relación a Bundy, sin explicación, y creo que eran necesarias.

Conclusión: una que es fan de los asesinos en serie y de toda la carga psicológica que rodea a sus personas, la he disfrutado bastante, aunque tenga sus puntos negativos que hacen que no sea una cinta redonda. Dadle una oportunidad, puede que os sorprenda. Yo ahora necesito ver el documental de Netflix.

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