Titulo Original: The Wolf of Wall Street
Año: 2013
Duración: 179
minutos
País: Estados
Unidos
Director: Martin Scorsese
Guión: Terence
Winter (Libro: Jordan Belfort)
Música: Howard Shore
Reparto: Leonardo Dicaprio, Jonah Hill, Margot Robbie, Matthew
McConaughey, Jean Dujardin, Kyle Chandler, Rob Reiner, Jon Bernthal, Jon
Favreau, Ethan Suplee, Cristin Milioti, Katarina Cas, Joanna Lumley, Spike
Jonze, Chris Kerson, Shea Whigham
Premios: 2013:
Premios Oscars, 5 nominaciones, incluyendo mejor película y director
2013: Globos de Oro, mejor actor de comedia
(Dicaprio). Mejor película
2013: Premios BAFTA, 4 nominaciones, incluyendo Mejor
director
2013: Critics Choice: mejor actor comedia (Dicaprio).
6 nominaciones
2013: National Board of Review: top 10 y
mejor guion adaptado
2013: American Film Institute: top 10 mejores
películas del año
Película basada
en hechos reales del corredor de bolsa neoyorquino Jordan Belfort (Leonardo
DiCaprio). A mediados de los años ochenta, Belfort era un joven honrado que
perseguía el sueño americano, pero pronto en la agencia de valores aprendió que
lo más importante no era hacer ganar a sus clientes, sino ser ambicioso y ganar
una buena comisión. Su enorme éxito y fortuna cuando tenía poco más de veinte
años como fundador de una agencia bursátil le valió el mote de “El lobo de Wall
Street”. Dinero. Poder. Mujeres. Drogas. Las tentaciones abundaban y el temor a
la ley era irrelevante. Jordan y su manada de lobos consideraban que la
discreción era una cualidad anticuada; nunca se conformaban con lo que tenían.
Yo no soy una de esas muchas personas que hacen su critica de
esta película comparándola con otras obras de Scorsese como ‘Casino’ y ‘Uno de
los nuestros’, simplemente porque no he visto esas películas (lo se, matadme,
lentamente si queréis). Si la comparara con aquellas seria mentir, y eso no
esta bien. Quizás haya visto la mitad de su filmografía, quizás algo menos, lo
que si que esta presente en todas las cintas de Scorsese es ese afán suyo por
mostrar el lado malo de las personas, ya sea de los protagonistas como de los
secundarios. Siempre tiene que haber algo de ‘corrupción’, por decirlo así, en
menor o mayor medida. En esta ocasión es la mayor medida posible. Y eso me
gusta.
Jordan Belfort es un tipo con una gran inteligencia y un buen
ojo para los negocios. Después de trabajar en Wall Street, y aprender todas las
habilidades, decide montar su propio negocio. Para ello se junta con toda una
serie de pardillos que lo único que quieren es ganar dinero a expensas de los
pobres a los que estafan con bonitas palabras. Pero el dinero lleva al exceso,
y el exceso lleva a la perdición. Pero para Jordan eso no es un problema: su
vida se compone de sexo, drogas, y más dinero. Y para él funciona. Hasta que la
ley se cruza en su camino.
Tengo que admitir que me gusta el cine de Scorsese. Me gusta
la manera que tiene de enrevesar las cosas, de mostrarlas tal y como son, de
sacar ese lado oscuro que todos tenemos y que nos empeñamos en ocultar. Nuestras
ambiciones. Aunque si es cierto que, cuando quiere, se saca una película mágica
y llena de sentimientos positivos que nos deja con la boca abierta y amando el
cine aun más (‘La invención de Hugo’). Y de las ambiciones, de los excesos, de
ese lado loco que todos tenemos va esta película y la historia (real) del
Jordan Belfort. Porque lo que llama la atención de esta película, tanto antes
de verla como después, es saber que es una historia real, que se relata tal y
como paso (o mas ‘light’, y eso que tiene poco de ‘light’). Nos hace
preguntarnos hasta donde estamos dispuestos a arriesgar por dinero, los excesos
de los que seriamos capaces, y si nosotros en su misma situación hubiésemos
actuado de la misma manera. Después de ver todo el desfase, te lo preguntas aun
más, porque el desenfreno es infinito.
Es una película adrenalitica, y no solo por lo que sucede,
sino por el sentimiento que te deja después. Sales exhausto del cine, y es que
esta tan bien contado que te hace parte de las fiestas, del exceso, del
desenfreno. Y es que es una historia surrealista, al fin y al cabo, escena tras
escena (algunas más que otras), con alguna que se te quedara grabada en la
memoria (Leonardo abriendo la puerta del coche puesto hasta el culo, esa lucha
entre los protagonistas en la cocina). Hay drama en el metraje, si, pero muy
poco, realmente breve, y no profundizado. Se centra más en la comedia, eso si,
una comedia negra, muy negra, y con mucho humor, negro también. Y esto es lo
que hace que funcione tan bien. Scorsese a acertado en contar la historia desde
el punto de vista de la comedia, y es que creo que es la mejor manera de contar
esta historia, porque a pesar de sentir pena por el adicto de Belfort, te ríes
con él (y no de él, que es lo gracioso). Y la voz en off del protagonista
ayuda, rompiendo la cuarta pared (lo que me gusta eso a mi) para que el
espectador sienta y viva todo lo que sintió y vivió él, multiplicado por el
efecto de tantas y tantas drogas que se metía a diario para seguir con su vida.
Pero si hay algo que funciona realmente bien en esta película
es su pareja protagonista: Leonardo Dicaprio y Jonah Hill. Ya sabemos del buen hacer
de Dicaprio, porque es un grande que merece más de lo que le dan, pero es que
en esta película le vemos en un registro al que no estamos acostumbrados (el
mismo se sorprendió al ganar un Globo de Oro en comedia), pero nos encanta
igual, porque lo hace bien, muy bien, y nos hace disfrutar. Después tenemos a
Jonah Hill, ese chico que poco a poco se esta volviendo más serio, y
demostrando que no es el simple actor gordito que en las comedias nos hace reír.
Tiene fondo, mucho, y aquí lo demuestra, siendo de lo mejor de la película. Un tándem
perfecto, una pareja con una química increíble, de esas que hacen historia en
el cine (si siguen trabajando juntos, claro). Perfectos. Pero no hay que
desmerecer al resto del reparto, todos y cada uno de ellos geniales en sus
papeles. Destacar a Margot Robbie, de la que yo pensaba que nada más que pasearía
su cara bonita por todos estos escenarios, y demostrándome que es más que una
cara bonita. Promete. Destacar tambien la breve, pero intensa, aparición de Matthew McCounaghey, y es que este chico esta acertando, y mucho con sus trabajos.
Una película que o bien te gustará mucho, o bien terminara resultándote
pesada (son tres horas, recordarlo), pero en las que el maestro Scorsese vuelve
a Nueva York a hacer de las suyas. Y lo consigue: una buena película más para
su extensa filmografía. Bravissimo!
A mi me gustó mucho, divertida, seria y con un toque trágico en el personaje. Gran post!!!
ResponderEliminarUn saludo