domingo, 1 de octubre de 2017

Kingsman: el círculo de oro (Kingsman: The Golden Circle)







Título original: Kingsman: The Golden Circle
Año: 2017
Duración: 141 min.
País: Reino Unido
Director: Matthew Vaughn
Guion: Matthew Vaughn, Jane Goldman (Personajes: Dave Gibbons, Mark Millar)
Música: Henry Jackman, Matthew Margeson
Reparto: Taron Egerton, Colin Firth, Julianne Moore, Mark Strong, Halle Berry, Pedro Pascal, Channing Tatum, Jeff Bridges, Elton John, Bruce Greenwood, Emily Watson, Edward Holcroft, Hanna Alström, Sophie Cookson, Michael Gambon, Poppy Delevingne, Björn Granath, Samantha Womack, Matt Letscher, Tom Benedict Knight, Alessandro De Marco.









Cuando el cuartel general de la agencia secreta es destruido, se descubre una organización de espionaje aliada en EE.UU. llamada Statesman, cuyo origen se remonta a la fecha en que ambas fueron fundadas. En una nueva aventura que pone a prueba la fuerza y el ingenio de sus agentes, ambas organizaciones secretas de élite aúnan sus esfuerzos para intentar derrotar a su enemigo común y salvar al mundo... algo que está convirtiéndose en una especie de hábito para Eggsy.




Para que luego digan, he ido al cine a ver la 2ª parte porque la 1ª la vi de una forma poco legal (descargada, que narices). Realmente era una cinta que no me atraía nada (el cine de espías sigue siendo uno de mis puntos débiles) pero mirad, me enamoró.
Disfruté mucho con la primera, me reí, y me encantaron sus personajes. Resulta original y una inteligente vuelta de tuerca y actualización del género. Vaya, que les quedó redonda.
Cuando vi el tráiler de la nueva, supe que tenía que verla, encima ahora en compañía de los espías de EEUU, y con la vuelta de Colin Firth (siempre supe que no había muerto, ¡lo sabía!).
¿Defrauda esta secuela? Ya os adelanto que no.



La agencia Kingsman es destruida y sólo dos de sus miembros sobreviven: Eggsy y Merlín. Ambos descubren que en EEUU hay otra agencia de espías como la suya, llamada Statesman, y deciden viajar hasta allí. Justo mientras ambas agencias se conocen, el mundo es atacado por una traficante de drogas llamada Poppy, que ha envenenado las drogas con las que trafica y ahora todo aquel que las haya consumido moría en apenas unos días. Sólo les dará el antídoto si además de pagarle, las legalizan. Ambas agencias se unirán para combatir a la malvada Poppy y frustrar sus planes. 





Mucha acción, parodia del cine de espías (el más visible, el de James Bond) y muchísimo humor (muy gamberro) son las claves tanto de la primera parte, como de esta. Así que esta secuela retoma todo lo que funcionó en la primera y lo incrementa. Acción aún más impresionante (todas las escenas de acción son la caña, rodadas y coreografiadas de forma impresionante) y mucho más humor, que viene a huevo porque las puyas entre americanos y británicos están a la orden del día. Y por supuesto, la escenita ‘incomoda’ no podía faltar, si la última vez vino con la princesa sueca, esta vez aparece de la mano de cierto dispositivo de localización que hay que meter por cierto sitio… y hasta aquí puedo leer.
Se redondea todo con una historia rocambolesca y divertida, un montaje genial, una estética chula y un guion ágil que hace que sus más de 2h se te pasen volando.
Quizás la única pega se podría decir es que pierde la originalidad de la primera, cinta que no te esperabas para nada… y que repite los esquemas que ya vimos. Pero tampoco me quejo.
Mención aparte a su buena BSO, me encantó. La escena de Merlín cantando el “Country Road” me llegó. Y esa nueva versión que cambia el country por gaitas escocesas tiene su gracia.  



En cuanto a los actores, retomamos a Taron Egerton (Eggsy), a Colin Firth (Galahad) y a Mark Strong (Merlín) de la agencia Kingsman, a los que ya conocíamos de sobra. Y se añaden a la fiesta los espías americanos de The Stateman. Los encabeza Jeff Bridges, que interpreta al jefe: Champagne. Le secundan Pedro Pascal como Whiskey, el experto cowboy texano con el látigo, Channing Tatum como Tequila y Halle Berry como Ginger Ale. Y como mala de turno, esta vez tenemos a Julianne Moore como la pirada Poppy. Y como extra a destacar, la presencia de Elton John como él mismo, divertidísimo.
Todos ellos estupendos, remarcar que: me encanta la vuelta de Colin con su personaje (un descubrimiento, que yo casi no he visto nada de Colin. Pero me ha encantado ese aire tan británico y elegante y esas hostias que mete), que Mark Strong te cae aún mejor y que los elegidos para la agencia americana me encantan. Lástima que Jeff Bridges no salga mucho. Pero se compensa con Pedro Pascal (me gusta muchísimo este hombre desde que lo vi en “Narcos”) y su personaje, que es un pro (¡esas escenas con el látigo!).
Eso sí, su cartel me genera muchas dudas. Si se supone que la vuelta de Colin era una sorpresa, ¿Por qué sale su foto y su nombre? Además, ¿Por qué no sale Pedro Pascal en el cartel (ni el nombre, que tiene cojones)? Su personaje es muy importante y sale bastante. Todo lo contrario es el caso de Channing Tatum, que acapara cartel pero apenas sale en la cinta…


Pero aunque todo este muy bien, y muy divertido, hay un párrafo que debo dedicarle a un tema (Ainara me entenderá). Sinceramente, por mí, todos los yonquis que se meten droga podrían haber muerto perfectamente. ¿Por qué salvar a gente que se coloca y/o mata por hacerlo? Oye, ¿qué excusa es esa de: “trabajo mucho, necesito coca para ir al día”? Que no, que no cuela. Igual me sale una vena muy nazi, pero yo no pago con el dinero de todo el mundo una cura para drogatas. He dicho.
El personaje de Pedro Pascal y el del presidente contaban con todo mi apoyo. Tenían la oportunidad de librarse de una parte de la escoria de la humanidad: los drogadictos.
Se ve que está claro que debo tener alma de malo de película…





En conclusión, muy divertida y recomendada. Sé que no a todo el mundo le gustará, su acción a raudales y su humor gamberro no pueden ser del gusto de todos, pero si entras al juego te molará. Si has visto la primera, no dudes en ir a ver esta segunda parte. Si estás en duda, anímate a ver la primera, que vale la pena.
Es de esas películas que enganchan y no puedes dejar de verlas, con personajes carismáticos, diversión, humor, parodia, muy poca vergüenza y mucha acción. Me ha encantado.











2 comentarios:

  1. Yo estaba a favor de Whiskey y del presidente. Creo que si hubieran hecho que Poppy metiera su virus mortal en el alcohol/azúcar/tabaco pues oye llego a entender el que se negocie y demás, es la única pega que le pongo a la película.
    Por lo demás me ha gustado y me he hecho más fan de Mark Strong (su versión de "country road" es genial) y de Colin Firth.

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    1. A mi es que también me descolocó lo de la droga XD entiendo que es más políticamente correcto lo de salvar a la gente y meterla en 'Proyecto hombre' y darles metadona, no matarlos, pero... no sé, simpatizaba con Whiskey y el presi, que se le va a hacer jaja XD

      En serio, muy fan de Colin Firth. Ya se lo comenté a alguien, este señor nunca me había atraído lo más mínimo (él es muy de pelis moñas inglesas, cosa que nunca veo), pero es verlo aquí vestido con esos trajes que le quedan tan bien y repartiendo hostias, y mira, me enamoro XD

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