lunes, 31 de agosto de 2015

Juana de Arco (Jeanne d'Arc)





Titulo original: The Messenger: The Story of Joan of Arc (Jeanne d'Arc).
Año: 1999.
Duración: 151 Minutos.
País: Francia.
Director: Luc Besson.
Guión: Andrew Birkin, Luc Besson.
Música: Eric Serra.
Reparto: Milla Jovovich, John Malkovich, Faye Dunaway, Dustin Hoffman, Pascal Greggory, Vincent Cassel, Tcheky Karyo, Richard Ridings, Desmond Harrington, Timothy West, Gina McKee. 
Premios:
1999: Nominada a los Premios Razzie: Peor actriz (Milla Jovovich).
1999: Premios César: 2 Premios. 8 nominaciones.











A mediados del siglo XV, Francia ha sido invadida por los ingleses y la parte noroccidental ha caído bajo el control del rey de Inglaterra. En el año 1420, una joven campesina llamada Juana (Milla Jovovich) ve a los ingleses como a herejes en un país ajeno. Con la ayuda de su Dios, encaminara al ejército francés a una nueva etapa: el principio de la liberación del reino de Francia.






Se trata de una película de carácter bélico e histórico que se centra en la leyenda de Juana de Arco, en el contexto de la guerra de los cien años. Esta cinta está más enfocada a la leyenda de Juana que a la historia en sí, al principio puede resultar demasiado infantil, pero a la larga y, sobretodo, al final, se convierte en un discurso racional y muy maduro.






En cuanto a los actores, tenemos a la conocida Milla Jovovich de protagonista. No lo hace mal, desde luego no tan mal como dice ese premio Razzie; el problema es que, encarnar a Juan de Arco es complicado ya que es difícil hacerlo de manera creíble. El personaje que más me gustó es sin duda Dustin Hoffman (que hace de la mente de Juana); sin palabras porque no quiero hacer spoilers.



La guerra de los cien años fue un conflicto (de 116 años) entre los ingleses y los franceses. La razón (aparte de su odio eterno por temas como el comercio) se inició con el ascenso al trono de Enrique II Plantagenet de Anjou pues se debía resolver el control que Inglaterra tenía sobre Francia. Las causas son complicadas de entender para una guerra tan larga (aunque, por supuesto, no batallaron ni por asomo 116 años) que suele dividirse en cuatro partes, y el asunto de Juana entraría en la tercera. Juana era un persona muy humilde que creyó oír a Dios decirle que encaminaría la victoria francesa y expulsaría por siempre a los ingleses (común caso de esquizofrenia aguda, pero que entonces se decía que habías sido tocado por la mano de Dios).No os digo nada más por no arruinaros la película.


Esto es un spoiler, pues se trata de la escena final de la película (aunque, si conoces un poco la historia puedes leerla tranquilamente). Como he dicho anteriormente, lo mejor es el juicio hacia Juana por brujería y otros aspectos. Esta bastante bien hecha pero conviene aclarar algunas. Cuando Juana es acusada y sentenciada a la hoguera, ésta recurre al Papa, el cual la ignora completamente. Tras ello, se hace un hoguera “falsa” con el propósito de asustarla, cosa que logran y, “engañada” firma una confesión, pero al ver que la encerraban de nuevo en la torre, se retractó de todo lo firmado. Antes de ser quemada, sí que fue confesada y no como aparece en la película (en la cinta, su “mente” es a quien le confiesa pero yo me refiero a que lo hace ante un cura de verdad). Otro aspecto interesante, es que se asegura que murió debido al monóxido de carbono que emitía el fuego, por lo que no sufrió tanto como puede parecer. Tras apagarse la hoguera, verificaron que era su cuerpo el que se había quemado (consideraban que tenía poderes sobrenaturales, así que no es tan disparatada la idea de que hubiese escapado); al darse cuenta de que era ella, se hecho brea y se volvió a quemar hasta que su cuerpo quedó reducido a cenizas (los huesos fueron lanzados al Sena). 




Recomiendo la película a pesar de su excesiva duración. Es una prueba de que, en Europa, hay directores que son capaces de realizar cintas de corte épico como en Hollywood.
Como ya he dicho, el final es apoteósico y es lo mejor de toda la película; digno de ser visto. Y nada más que decir, ese fue el final para una chica de apenas 19 años que fue castigada por brujería.





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