Expediente Warren: el caso Enfield (The Conjuring 2: The Enfield Poltergeist)

Título original: The Conjuring 2: The Enfield Poltergeist

Año: 2016

Duración: 133 min.

País: EEUU

Director: James Wan

Guion: Carey Hayes, Chad Hayes

Música: Joseph Bishara

Reparto: Vera Farmiga, Patrick Wilson, Frances O'Connor, Madison Wolfe, Lauren Esposito, Patrick McAuley, Benjamin Haigh, Maria Doyle Kennedy, Simon Delaney, Franka Potente, Simon McBurney.

 

Secuela de la exitosa "Expediente Warren" (2013), que lleva de nuevo a la pantalla otro caso real de los expedientes de los renombrados demonólogos Ed y Lorraine Warren. En este caso ambos viajarán al norte de Londres para ayudar a una madre soltera que tiene a su cargo cuatro hijos y que vive sola con ellos en una casa plagada de espíritus malignos.

Me ha costado subir esta reseña al blog porque cuando una película te gusta tanto, parece que se hace mucho más complicado hablar de ella. ¿Qué decir cuando todo te parece estupendo?
El caso es que “Expediente Warren: The Conjuring” (la primera) ya fue todo un peliculón de terror y su director James Wan se ha convertido en un icono del género. Y es que, todo lo que ha dirigido hasta el momento ha sido de bueno a muy bueno (al menos, es lo que me parece a mí), ya es todo un referente en el cine de terror, por su estilo y por devolvernos un género que parecía que últimamente se repetía cada vez más y más...
Desde que apareció con la genial “Saw” (2004) no ha parado de darnos títulos estupendos como: “Silencio desde el mal” (2008), “Insidious” (2010), “Insidious: Capítulo 2” (2013) y “Expediente Warren: The Conjuring” (2013). Su nombre siempre equivale a disfrutar un buen título de terror.
Y si, dentro de unos años serán películas de culto, de esas que entran en los top 10 de cine de terror de la historia, ya lo veréis.

Para esta ocasión, volvemos con el matrimonio Warren (Ed y Lorraine, que están basados en un matrimonio real de investigadores de lo paranormal) que tiene que viajar a Londres, donde una mujer que se encarga de sus cuatro hijos sola ve como una de sus hijas ha sido poseída por un demonio que les hace la vida imposible a todos.
Las segundas partes de películas de terror no suelen ser buenas, pero si es James Wan el que las lleva a cabo la cosa cambia (aunque “Insidious 2” también estuvo bien, no fue tan buena como la primera). Y es que, este segundo caso de la familia Warren es aún mejor que el primero. Nos da más de todo lo que nos gustó en la primera parte y funciona perfectamente en todo momento.

James Wan es un ejemplo de que el terror de la ‘vieja escuela’ aún vive, y ha sido gracias a él el resurgir de este tipo de cine. A la vuelta de aterrorizar al espectador con una buena atmosfera y sustos puntuales de personajes terroríficos, y no ahogarle en un baño de sangre y vísceras (y que conste, que me encanta el gore). Sus señas identificativas siempre están ahí: casas encantadas, demonios muy oscuros y siniestros (y característicos, no se olvidan), personajes con lo que se conecta y un ambiente terrorífico muy particular.
La estructura nos presenta un drama familiar seguido de episodios de terror que cada vez van aumentando. Un guion rápido y ameno, que entremezcla perfectamente sus historias: el drama de la familia poseída, la vida del matrimonio de cazadores de demonios y los sucesos paranormales. Y a todo esto, sumémosle una ambientación estupenda. Como resultado, tenemos una genial película de terror, que sabe usar los tópicos y a la vez innovar.

En cuanto a los actores, Patrick Wilson repite como Ed, y Vera Farmiga como Lorraine. Sus personajes son carismáticos, se les ve muy cómodos y compenetran muy bien. Es más, una de las escenas que más se recuerdan (aparte de las terroríficas, claro) es el bonito momento ‘musical’ con el ‘Can’t help falling in love’ de Elvis Presley. Y es que, uno de los mejores puntos de la película es lo carismáticos que resultan para el público sus dos protagonistas.
El resto de los actores muy bien también, destacando a la pequeña Madison Wolfe, muy creíble en su actuación y durante sus posesiones.
Y en cuanto a los sustos, son sustos de verdad, de esos que te hacen saltar en la butaca. Unas veces previsibles, otras no. Y mostrando elementos realmente terroríficos, porque… ¿a que no vais a olvidar a esa monja o al hombre retorcido? Son impresionantes y muy chulos…

En definitiva, no os la perdáis. Una cinta de terror que hará las delicias de todos aquellos que somos fans incondicionales del cine de terror, y para todos aquellos que les guste ir a sufrir al cine… ¡yo ya espero con ganas más casos de los Warren! Siempre que Wan esté a cargo de ellos, claro…

Lo único malo es que James Wan ahora va a estar liado con “Aquaman” y en los próximos años dudo que nos traiga algo nuevo… sólo nos quedará disfrutar de la película “Nunca apagues la luz” (este agosto en nuestro país), que no dirige pero si produce y tiene muy buena pinta.